El 26 de febrero de 2025, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) anunció una inversión de 1.000 millones de dólares como parte de una estrategia integral para el control de la Influenza Aviar de Alta Patogenicidad (IAAP), con el objetivo de proteger la industria avícola y reducir el precio de los huevos.
Este plan, compuesto por cinco puntos clave, asigna 500 millones a medidas de bioseguridad, ampliando las Evaluaciones de Bioseguridad en Vida Silvestre a productores en todo el país, dado que el 83% de los casos de IAAP provienen de la transmisión por aves silvestres.
También se implementarán auditorías ampliadas, el despliegue de 20 epidemiólogos especializados y financiamiento para mitigar riesgos críticos.
Además, se destinarán $400 millones para indemnizar a productores afectados y agilizar la repoblación de granjas, junto con la eliminación de cargas regulatorias innecesarias que limitan la producción y elevan los precios de los huevos.
El plan contempla, asimismo, una inversión de 100 millones en investigación de vacunas, tratamientos y estrategias innovadoras enfocadas en gallinas de postura, con un compromiso de colaboración con socios comerciales para evitar impactos en exportaciones.
Por último, se explorarán opciones temporales de importación para reforzar el suministro nacional y estabilizar los precios al consumidor, adoptando un enfoque multisectorial que combina salud animal, seguridad alimentaria y estabilidad económica.
Por otro lado, el pasado 20 de febrero de 2025, un grupo bipartidista de senadores, liderado por Todd Young (R-Indiana) y Joni Ernst (R-Iowa), envió una carta al Departamento de Agricultura de Estados Unidos proponiendo un plan estratégico para reforzar la respuesta ante el brote de Influenza Aviar de Alta Patogenicidad (IAAP).
En la carta, los legisladores enfatizan la gravedad sin precedentes del brote, que ya se extiende por cuatro años, ha causado la despoblación de más de 136 millones de aves en granjas comerciales y ha afectado a trabajadores agrícolas.
Los legisladores proponen seis acciones concretas, implementar una estrategia de vacunación para gallinas de puesta y pavos, fortalecer la comunicación con socios internacionales para proteger el comercio, establecer una Iniciativa estratégica contra la IAAP con la participación de expertos de la industria, apoyar a los estados en la aplicación de la Estrategia Nacional de Pruebas de Leche, asegurar la disponibilidad de auditores calificados para evaluar la bioseguridad, y revisar las tasas de indemnización para compensar adecuadamente a los productores afectados.
La iniciativa, respaldada por 15 senadores y con una carta paralela en la Cámara de Representantes, representa un enfoque colaborativo para hacer frente a lo que califican como "el mayor brote de salud animal que el USDA ha enfrentado en su historia".