Los veterinarios de Madrid celebran San Francisco de Asís reivindicando el papel clave de la profesión

La profesión veterinaria es fundamental en la vida diaria de la ciudadanía, ya que abarca no solo el cuidado de la salud de los animales, sino también la seguridad alimentaria, la prevención de zoonosis, la salud pública y la protección del medio ambiente.

En este marco, hoy jueves 3 de octubre, profesionales veterinarios de Madrid se han reunido en el Real Jardín Botánico de la UCM con motivo de la celebración anual de San Francisco de Asís, el santo patrón de los animales y de los veterinarios. El evento, organizado por el Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid (Colvema) en colaboración con la Universidad Complutense (UCM) y la Universidad Alfonso X El Sabio (UAX), ha servido para reivindicar y destacar la relevancia de la profesión veterinaria en nuestra sociedad.

La apertura de este evento ha contado con la intervención de Felipe Vilas Herranz, presidente del Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid: “Hoy es un día especial en el que no solo resaltamos los valores de nuestra profesión, sino que también destacamos el compromiso y la dedicación que cada uno de nosotros aporta cada día para promover la salud y el bienestar animal, la seguridad alimentaria o la salud pública. Representamos una profesión vocacional, esencial para la sociedad por nuestra contribución a la salud global, y estamos muy orgullosos de pertenecer a ella. Muchas gracias, compañeros y compañeras, por vuestra profesionalidad y por vuestro buen hacer”.

Durante el acto se ha puesto en valor la profesión veterinaria como una formación multidisciplinar que faculta a los veterinarios para acceder a trabajar en una gran variedad de empleos, como la clínica de pequeños animales de compañía y de animales de granja; en la inspección de los alimentos en sus distintas fases; en la prevención de enfermedades y epidemias, así como en la investigación o en la conservación de la biodiversidad.

En el acto también participaron Ana Rodríguez Castaño, secretaria general de Recursos Agrarios y Seguridad Alimentaria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación; Consuelo Serres Dalmau, decana de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid e Isabel Rodríguez Hurtado, decana de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Alfonso X El Sabio.

Rodríguez Castaño señaló que “pertenecer a un gremio es importante. Durante mi carrera, estar colegiada siempre ha sido beneficioso. Me enorgullezco de una profesión como la nuestra, estrechamente basada en la relación con los animales.”

A continuación, tuvo lugar la entrega de premios a los mejores expedientes de grado y doctorado y la distinción a los colegiados que este año finalizaron su vida laboral.

Por último, se hizo entrega de las distinciones de Colegiado de Honor, que recayeron en: José Ramón Escribano, ex presidente de la Asociación Madrileña de Veterinarios de Animales de Compañía (AMVAC), fundador del Hospital VETSIA y ex vocal de la Junta de Gobierno del Colegio de Veterinarios de Madrid, y José Manuel Sánchez-Vizcaíno, catedrático de Sanidad Animal de la Universidad Complutense de Madrid.

Para finalizar, la clausura estuvo a cargo de Joaquín Goyache, Rector Magnífico de la Universidad Complutense de Madrid, que señaló como “la profesión veterinaria ha cambiado y evolucionado mucho. Actualmente, el 65 % de sus profesionales son mujeres, siendo un gremio joven, con una media de edad de 44 años en la Unión Europea”. A esto añadía: “Nuestra profesión es una vocación que marca la diferencia en la sociedad. Tenemos una gran capacidad de seguir haciendo un mundo mejor apoyándonos en ella.”

Con este acto, el COLVEMA no solo celebra la figura de San Francisco de Asís como protector de los animales y patrón de los veterinarios, sino que sirve como una plataforma para poner en valor la contribución de estos a la salud pública y la sociedad en general, reivindicando su papel como garantes del bienestar animal, de la salud pública y la seguridad alimentaria. Además, fomenta el reconocimiento del esfuerzo de estos profesionales, muchas veces invisible, pero vital para el funcionamiento adecuado de sectores como la ganadería, la alimentación y la sanidad.