La enfermedad de Lyme (LD) es una enfermedad bacteriana transmitida por vectores común en los países de la Unión Europea (UE) y el Espacio Económico Europeo (EEE). Su agente patógeno, Borrelia spp, se transmite a través de la picadura de garrapatas infectadas, principalmente Ixodes spp.
Otras garrapatas presentes en Europa, como Dermacentor spp. y Haemaphysalis spp., han sido identificados como portadores de Borrelia spp., aunque se sabe poco acerca de su competencia como vector. Los ciervos y los roedores son huéspedes animales comunes, cruciales para el mantenimiento del ciclo zoonótico en la naturaleza.
En la UE/EEE, donde se considera endémica en muchos lugares, con más de 360.000 casos notificados en las últimas dos décadas, el principal vector de la LD es Ixodes ricinus y los principales patógenos son Borrelia afzelii, B. garinii y B. burgdorferi.
En 2018, la neuroborreliosis de Lyme se incluyó en la lista de enfermedades bajo vigilancia epidemiológica de la UE debido a las tendencias crecientes en el diagnóstico de casos de LD y la presencia de vectores. Las áreas de presencia de vectores de LD se mapearon basándose en información actualizada hasta marzo de 2022 e incluyen regiones de Bélgica, Croacia, República Checa, Francia, Alemania, Países Bajos, Polonia y España.
Los factores ambientales pueden influir en la distribución de LD de diferentes maneras a través de sus efectos tanto en el vector como en las poblaciones de huéspedes. Por ejemplo, el aumento de las temperaturas y los cambios en los patrones de lluvia pueden provocar aumentos en las poblaciones de garrapatas, a través de efectos directos e indirectos en sus huéspedes (por ejemplo, aumento de las poblaciones de roedores después de la siembra de árboles).
Sin embargo, los cambios en las precipitaciones también pueden tener efectos negativos sobre las poblaciones de garrapatas, especialmente si se registran en zonas áridas. Además, Ixodes ricinus se está expandiendo a mayores altitudes y latitudes como resultado de los cambios en el clima local, aunque, dependiendo del momento en que se producen estos cambios, las poblaciones de garrapatas disminuyen. Por lo tanto, es importante comprender estas relaciones y su impacto para describir y predecir la diseminación de LD.
ARTÍCULOS A REVISIÓN
Para profundizar en dicho aspecto, un estudio reciente realizado por investigadores del Instituto de Salud Carlos III, Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y del Ayuntamiento de Madrid, tuvo como objetivo revisar la literatura existente para identificar la relación entre factores meteorológicos/climáticos y ambientales, así como la influencia del cambio climático, sobre la presencia y/o distribución de vectores y la circulación de LD en garrapatas, huéspedes humanos y no humanos. en la UE/EEE.
Para ello, realizaron una revisión sistemática de la literatura de acuerdo con las directrices para examinar el impacto de diversos factores meteorológicos y/o ambientales en la distribución de la enfermedad.
La estrategia de búsqueda sistemática arrojó 1218 referencias. Después de examinar los títulos y los resúmenes, conservaron 113 artículos, de los cuales 81 de ellos cumplieron todos los criterios de inclusión.
La mayoría de los artículos (n = 59) se publicaron entre 2011 y 2022. Seis estudios cubrieron más de un país y tres estudios se centraron en todo el continente europeo. La mayoría de las investigaciones se llevaron a cabo en Alemania (n = 15), Francia (n = 12) y Bélgica (n = 11).
Los investigadores extrajeron y compararon la información de todos los artículos, arrojando una serie de conclusiones. En primer lugar, confirmaron que la enfermedad de Lyme se está expandiendo por toda Europa, y que la epidemiología de la LD está relacionada con la presencia de vectores, “lo cual está relacionado con el clima y otros factores ambientales que están cambiando a nivel mundial debido al cambio climático en curso”.
TEMPERATURA O HUMEDAD, ENTRE LOS FACTORES MAS DETERMINANTES
Los factores ambientales que con mayor frecuencia se correlacionaron con cambios en la dinámica de LD fueron “la temperatura, la precipitación, la humedad y la incursión del ser humano en diferentes hábitats naturales terrestres”.
Por ejemplo, varios estudios coincidían en que las temperaturas diarias más altas se asociaron con comienzos de actividad más tempranas en las garrapatas.
En cuanto a las tierras agrícolas y la urbanización, otro hallazgo fue que los campos y pastos se relacionaron positivamente con la abundancia de garrapatas, y los parques con las picaduras de las mismas.
Desafortunadamente, lamentan que el ciclo zoonótico completo no fue analizado sistemáticamente en la mayoría de los artículos. Por tanto, “es difícil determinar el impacto independiente del medio ambiente sobre los diferentes componentes del ciclo de transmisión”.
Así, explican que “es importante adoptar un enfoque de Una Sola Salud para comprender la epidemiología de la LD y fortalecer la vigilancia de esta enfermedad emergente y su vector”.
Si bien la temperatura está aumentando en todo el mundo, los impactos del cambio climático en las precipitaciones “presentan variaciones geográficas importantes y, en consecuencia, el impacto global del cambio climático en las poblaciones de garrapatas y la epidemiología de la LD puede presentar variaciones importantes dentro de Europa”, sentencian.
IMPORTANCIA DE CONTROLAR LAS GARRAPATAS EN LAS MASCOTAS
Los perros también pueden sufrir la picadura de las garrapatas, con la posible consecuente transmisión de enfermedades como babesiosis o ehrlichiosis. Del mismo modo, pueden actuar como reservorios de garrapatas e incrementar el riesgo de que las personas en contacto con el animal sufran alguna picadura.
Por este motivo, realizar un adecuado tratamiento antiparasitario resulta imprescindible para garantizar la salud de las mascotas, y, por ende, de los dueños.
Con el objetivo de facilitar esta tarea, Elanco, laboratorio especializado en sanidad animal y con más de 20 años de experiencia en antiparasitarios orales, ha desarrollado Credelio, como principio activo, un pequeño y sabroso comprimido mensual, de fácil administración que actúa muy rápido y protege a los cachorros y perros de las garrapatas y pulgas. Credelio comienza a eliminar garrapatas existentes en 8 horas, las pulgas existentes en 6 horas y las nuevas que se puedan adquirir a lo largo del mes en 4 horas.