Las espiroquetas de la fiebre recurrente transmitida por garrapatas (TBRF) son patógenos desatendidos en México, y la infección humana con frecuencia se diagnostica erróneamente debido a síntomas inespecíficos. La infección por Borrelia turicatae se asocia con fiebres irregulares, vómitos, escalofríos, náuseas y meningitis.
Los síntomas neurológicos que siguen a la infección pueden diagnosticarse erróneamente como enfermedad de Lyme y el uso de pruebas serológicas no específicas complica aún más un diagnóstico preciso de TBRF.
Estudios anteriores han utilizado lisados de proteínas completas de Borreliella (Borrelia) burgdorferi en ELISA y ensayos de inmunotransferencia para el diagnóstico de enfermedades, pero se produce reactividad cruzada serológica independientemente de si los pacientes están infectados con espiroquetas que causan Lyme o fiebre recurrente transmitida por garrapatas.
Las garrapatas argásidas transmiten la mayoría de las especies de espiroquetas TBRF, y el ciclo de vida de esas garrapatas confunde aún más una comprensión clara de la epidemiología de la enfermedad. Los argásidos del género Ornithodoros se alimentan rápidamente y viven en cavidades y rara vez se encuentran adheridos al huésped. Un estudio de caso de Panamá observó personas que informaron haber sido picadas por insectos mientras dormían. Una investigación identificó garrapatas Ornithodoros puertoricensis debajo de las baldosas y dentro de las grietas de los alféizares de las ventanas. Esos hallazgos indicaron que, una vez introducidas en la vivienda, las garrapatas se dirigían a los ocupantes humanos como su principal fuente de sangre.
Para aclarar la superposición ecológica de las espiroquetas TBRF y los humanos, un trabajo reciente ha recolectado garrapatas argásidas en entornos peridomésticos en México. Los autores se propusieron la identificación de garrapatas Ornithodoros turicata del pueblo de Camayeca en Sinaloa, México. Además, determinaron la infección en las garrapatas recolectadas alimentándolas con un ratón de laboratorio, aislando espiroquetas de la fiebre recurrente transmitida por garrapatas de la sangre del ratón y analizando si el patógeno era B. turicatae mediante análisis genómico.
Para ello, recogieron garrapatas de distintos hogares y las identificaron mediante microscopía y secuenciando una porción genética. Igualmente, identificaron mediante distintas pruebas que dichas garrapatas estaban infectadas por B. turicatae.
Estos hallazgos indican que “se necesitan actualizaciones para los modelos de distribución de las garrapatas O. turicata”. Los autores explican cómo se predijo que nuevas regiones del norte de México tendrían hábitat para las garrapatas O. turicata, pero había pocas probabilidades de encontrar un hábitat adecuado en otras áreas del país. Sin embargo, “además de recolectar garrapatas de Camayeca, México, también recuperamos garrapatas O. turicata de la ciudad de Aguascalientes”. Las 2 ciudades, señalan, están separadas por más de 1.000 km.
Aguascalientes se encuentra en el centro del país y se considera un ambiente templado, a ≈1,900 m de elevación, mientras que Camayeca es una región árida desértica a ≈150 m de elevación. “Las diferencias ambientales entre las 2 ciudades muestran una idoneidad del hábitat más amplia para las garrapatas O. turicata de lo que se predijo anteriormente”.
En resumen, “la identificación de garrapatas O. turicata infectadas en un entorno peridoméstico sugiere que es probable que el TBRF no se registre en México”. En apoyo de este hallazgo, “estudios de serodiagnóstico retrospectivos detectaron exposición humana a espiroquetas de la fiebre recurrente transmitida por garrapatas en poblaciones originalmente diagnosticadas con fiebre de origen desconocido”.
Dadas esas observaciones y los hallazgos de este trabajo, “se deben realizar estudios adicionales para determinar las frecuencias de infección de las garrapatas argásidas recolectadas en entornos peridomésticos y para definir la distribución y ecología de las garrapatas O. turicata y otras garrapatas argásidas de importancia humana en México para aumentar el conocimiento y la conciencia sobre estas garrapatas y la amenaza potencial que representan para la salud humana y animal”.