Las enfermedades animales transfronterizas y emergentes han aumentado en las últimas décadas. Enfermedades que antes solo se notificaban fuera de las fronteras de Europa ahora se producen con mayor frecuencia en suelo europeo, y no solo en los climas australes del continente.
Pero, ¿por qué hay cada vez más brotes de enfermedades animales en Europa? ¿Debería la Unión Europea (UE) promover la vacunación a gran escala? ¿Y cómo puede la UE ayudar a los ganaderos a gestionar la decisión de vacunar o sacrificar? Estas fueron solo algunas de las preguntas que se debatieron durante el evento celebrado en el Parlamento Europeo, organizado por los eurodiputados Sargiacomo, Cassart y Kohler.
Los panelistas de los sectores veterinario, agrícola y de salud animal debatieron las políticas actuales de salud animal de la UE junto con representantes de la Comisión Europea, agencias de la UE (EMA y EFSA) y la Organización Mundial de Sanidad Animal.
En la apertura del evento, el eurodiputado Eric Sargiacomo, originario de una de las regiones de Francia más afectadas por la influenza aviar altamente patógena (IAAP), afirmó que “ante este resurgimiento de enfermedades animales, es evidente que Europa necesita una estrategia de salud animal actualizada y eficaz, en la que la vacunación debe desempeñar un papel central. ¡Prevenir es mejor que curar, e incluso mejor que sacrificar animales! Las medidas preventivas no solo cuestan menos al contribuyente, sino que también favorecen una agricultura más sostenible ”.
Benoit Cassart, ganadero belga, añadió que “las enfermedades transmitidas por vectores, como el virus de la lengua azul (BTV-3), tienen un impacto muy negativo en la ganadería europea. Debemos pasar del enfoque actual de gestión de crisis a una cultura de prevención. Necesitamos una mayor armonización de las normas de salud animal, una investigación más coordinada y más inversiones en la compra y distribución de vacunas, así como una mayor simplificación de los procedimientos para el movimiento de animales en el mercado común”.
El ingeniero agrónomo y agricultor, eurodiputado alemán Stefan Kohler, concluyó que “el sector agrícola europeo necesita soluciones pragmáticas más pronto que tarde. Los brotes de enfermedades animales son una adversidad más que se suma a la ya larga lista de desafíos que los agricultores enfrentan con cada vez mayor regularidad. Los recientes brotes de peste porcina africana (PPA) y fiebre aftosa (FA) en Alemania y la consiguiente necesidad de medidas de emergencia, ponen de relieve la necesidad de actualizar las políticas de preparación".
Por su parte, la secretaria general de AnimalhealthEurope, Roxane Feller, finalizó con que “mantener a los animales sanos y evitar los sacrificios masivos de animales deberían ser las principales prioridades de los responsables de la toma de decisiones de la UE. Las enfermedades animales, en particular las enfermedades transmitidas por vectores, y aquellas con altas tasas de morbilidad o mortalidad, pueden tener consecuencias nefastas en primer lugar para los animales, pero también para la producción alimentaria sostenible, el futuro socioeconómico de las comunidades agrícolas de Europa, el uso de antibióticos, la salud mental de los agricultores y la salud pública. Establecer un mecanismo para intercambios regulares entre la industria de la salud animal y las autoridades solo puede servir para mejorar la preparación y respuesta ante emergencias sanitarias de Europa”.