La amplia gama de especies mantenidas como mascotas, excluyendo animales domésticos (como perros, gatos, vacas, caballos, cerdos u ovejas) que pueden ser nativos o no nativos, pueden definirse como animales de compañía no tradicionales (NTCAs), o más coloquialmente, mascotas exóticas. El número de mascotas exóticas ha ido aumentando, y es más probable que las generaciones más jóvenes estén interesadas en tener estas mascotas.
Según las últimas estadísticas sobre animales de compañía, la población combinada de Portugal (PT) y España (SP) era de 9.753.000 NTCA, incluidos 5.701.000 aves, 782.000 acuarios, 1.762.000 pequeños mamíferos y 1.508.000 reptiles, lo que representa el 32,8 % de la población total combinada de mascotas. No existen datos sobre la prevalencia de la tenencia de estos animales. Además, los gobiernos de ambos países no proporcionaron datos oficiales.
Los pros y contras de la relación entre humanos y animales de compañía ya han sido descritos, y mantener NTCAs está asociado con un mayor riesgo zoonótico. Ya existe información detallada sobre los riesgos zoonóticos, específicos para cada taxón. Por lo tanto, los veterinarios no solo deben tratar a los animales con zoonosis, sino también desempeñar un papel en la prevención de la zoonosis en humanos, proporcionando educación y medidas preventivas para reducir la probabilidad de transmisión de la zoonosis.
Dado que los propietarios consideran que los veterinarios son fuentes fiables de información, la formación de estos profesionales en comunicación ha adquirido una importancia fundamental para que puedan cumplir las expectativas de los propietarios y utilizar los medios de comunicación actuales para llegar al público. Esta formación puede ser crucial para ayudar a deconstruir conceptos erróneos generales sobre la cría, el comportamiento y el bienestar de las mascotas.
El objetivo principal de una encuesta en la que ha participado Albert Martínez-Silvestre, del Centro de Rescate de Reptiles y Anfibios de Cataluña, fue investigar las opiniones, preferencias y conocimientos de los propietarios de NTCA en España y Portugal con respecto a aspectos relacionados con la consulta veterinaria, como zoonosis, uso de antibióticos y parasiticidas y los riesgos asociados. El objetivo secundario fue determinar si existían diferencias entre los grupos demográficos. Esto aumentaría la eficacia de la comunicación entre veterinarios y propietarios de NTCA, brindando así una mejor atención a los NTCA.
Se realizó una encuesta, que dio como resultado 541 encuestados de Portugal y España. Los resultados se caracterizaron en función de la demografía, los datos sobre el comercio y el uso de antibióticos y parasiticidas, y las relaciones entre estas variables. El 22,2 % de los encuestados eran de áreas rurales, mientras que el 77,8 % eran de áreas urbanas, sin diferencias significativas entre PT y SP. En cuanto al género, el 75,6 % eran mujeres, el 24 % hombres y el 0,4 % no binarios.
Por otro lado, en cuanto a los apéndices de la CITES, el 59 % de los encuestados los conocía y el 43 % afirmó que contaba con la documentación adecuada al adquirir los animales. Además, el 41 % de los encuestados sabía qué eran las listas positivas. "No hubo una diferencia significativa entre PT y SP, pero sí una diferencia al comparar a los criadores y vendedores con el resto de los encuestados". Por ejemplo, los criadores tenían 5,9 veces más probabilidades de investigar antes de adquirir los animales, 7,4 veces más probabilidades de saber qué era la CITES.
Los autores descubrieron que todavía hay una parte considerable de animales no registrados y que, en general, “los propietarios reconocieron la resistencia a los antimicrobianos y el uso inadecuado de parasiticidas”.
Asimismo, la capacidad de los propietarios de NTCA para reconocer el término zoonosis fue de poco más de la mitad de los encuestados, “lo que nos dice que los veterinarios y los médicos deben seguir educando al público en general sobre el tema”. Concretamente, de todos los encuestados, el 31 % eran profesionales de la salud humana y animal, y el 60 % reconocía la zoonosis. En este sentido, matizan que "los profesionales de la salud tenían 13 veces más probabilidades de identificar el término: el 92% dijo que sabía qué era la zoonosis, frente al 46% de los encuestados que no eran profesionales de la salud y tenían el mismo conocimiento.
Además, las personas que reconocieron el término zoonosis tenían más probabilidades de reconocer la resistencia antibiótica y el uso inadecuado de los antiparasitarios. Se preguntó a los encuestados si su veterinario les había explicado alguna vez qué era una prueba de sensibilidad a los antibióticos, y el 46 % de los encuestados respondió afirmativamente. Además, el 65 % dijo que aceptaba esta prueba cuando su veterinario se la proponía.
En resumen, aunque, en general, hay algunos buenos resultados sobre el conocimiento de los dueños de mascotas exóticas, “todavía hay margen de mejora”. Por lo tanto, los autores esperan que “la información reunida aquí debería ayudar a los veterinarios a ser más eficientes en la educación de los propietarios de NTCA sobre la resistencia a múltiples fármacos y los riesgos zoonóticos”.