A falta de nuevos focos desde hace más de un mes, Francia se declaró libre de gripe aviar altamente patógena el 17 de diciembre ante la Organización Mundial de Sanidad Animal. El regreso a este estatus es una noticia importante para todos los actores del sector avícola francés que han sabido movilizarse junto a los servicios estatales en la lucha contra esta epizootia.
Desde principios de agosto se han detectado doce brotes de gripe aviar altamente patógena (IAAP) en granjas avícolas y tres en corrales. Tras la despoblación y la desinfección de las explotaciones infectadas, la vigilancia de las dos últimas zonas infectadas se levantó, respectivamente, el 15 de diciembre en las Landas y el 16 de diciembre en Allier.
La recuperación del estatus libre de enfermedad es el resultado de la movilización y el compromiso de todos los actores del sector para implementar la estrategia de control concertada en las zonas afectadas, combinada con la estrategia de vacunación desplegada por segundo año, desde el 1 de octubre de 2024.
El estatus de libre de enfermedades abre perspectivas más favorables para los sectores que dependen en parte de los mercados de exportación. No obstante, todos los actores del sector deben mantener una vigilancia constante.
Además, la dinámica de la circulación de virus entre las aves silvestres sigue activa en Europa y, en particular, en los corredores migratorios. Por este motivo, el riesgo epizoótico se mantiene en su nivel máximo (Alto). La vigilancia, la bioseguridad y la vacunación son pilares complementarios de la prevención contra la IAAP.
La gripe aviar ha causado la muerte de más de 300 millones de aves en todo el mundo y el virus "está traspasando cada vez más las barreras entre especies", según responsables sanitarios de la ONU.
En una actualización sobre la mutación del virus, conocido como H5N1, la doctora Madhur Dhingra, de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), afirmó que "se ha extendido a la fauna silvestre".
Más de 500 especies de aves han sido infectadas, junto con al menos 70 especies de mamíferos, entre ellos el amenazado cóndor de California y los osos polares.
En las regiones que dependen en gran medida de las aves de corral como principal fuente de proteínas, la FAO insistió en que la gripe aviar "representa una grave amenaza para la seguridad alimentaria y nutricional".
La doctora Dhingra advirtió que cientos de millones de personas han visto afectados sus medios de subsistencia por el virus, una carga económica para los agricultores que podría impedirles invertir en medidas adecuadas de bioseguridad.
Tras la aparición del virus de la gripe H5N1 en el ganado lechero, la Organización Mundial de la Salud (OMS) se ha sumado a los llamamientos para reforzar la vigilancia y la bioseguridad en las granjas, con el fin de mantener a salvo a animales y personas.
Según la agencia sanitaria de la ONU, en 2024 se han infectado 76 personas con la cepa H5 de la gripe aviar, y la mayoría eran trabajadores agrícolas. Más de 60 casos se originaron en EE.UU., que también ha notificado brotes de H5 en animales salvajes y aves de corral y, más recientemente, en ganado lechero.