Varios partidos instan al Gobierno a pedir a Europa que retome las propuestas pendientes de bienestar animal

Los grupos parlamentarios de SUMAR, Republicano y Mixto, han presentado en las Cortes Generales una Proposición no de Ley sobre el compromiso de la Comisión Europea con los Reglamentos pendientes en materia de bienestar animal para su debate y aprobación en la Comisión de Asuntos Exteriores.

Los diputados recuerdan que, en su estrategia “De la Granja a la Mesa”, la Comisión Europea se comprometió a revisar la legislación vigente de la Unión Europea en materia de bienestar animal. En este sentido, señalan que, en respuesta a la Iniciativa Ciudadana Europea (ICE) titulada “Acabemos con la era de las jaulas”, que recogió más de 1,4 millones de firmas en 2021, la Comisión Europea manifestó su compromiso de prohibir las jaulas para las especies incluidas en la ICE. Asimismo, la ICE titulada “Europa libre de pieles”, que pide la prohibición de la cría de animales de peletería en la Unión Europea y de la comercialización de productos procedentes de las granjas de peletería, recogió más de 1,5 millones de firmas.

Además, en octubre del año pasado, el Eurobarómetro publicó una nueva encuesta especial sobre las actitudes de los europeos con respecto al bienestar animal, en la que “se confirmó el enorme apoyo de los ciudadanos de la Unión a la mejora de las normas de bienestar animal en la UE”, señalan. Entre estos datos, destacan que “el 91 % de las personas encuestadas considera importante proteger el bienestar de los animales de granja para asegurar que tienen unas condiciones de cría adecuadas”.

No obstante, al presentar su programa de trabajo para el año 2024, “la Comisión Europea indicó que sólo publicaría la propuesta sobre la protección de los animales durante el transporte y se refirió a la necesidad de más evaluaciones y diálogo sobre las demás propuestas previstas, destinadas a revisar la obsoleta legislación de la Unión Europea en materia de bienestar animal”, lamentan los parlamentarios. 

“Sin embargo, los agricultores, la industria, las organizaciones no gubernamentales y otras partes interesadas llevan varios años debatiendo esta revisión, no solo a través de los grupos habituales de diálogo civil creados por la Comisión Europea, sino también a través de la Plataforma de la UE para el Bienestar Animal y sus numerosos subgrupos. Además, en el contexto del proceso de mejora de la legislación, se llevaron a cabo dos consultas públicas en preparación de la revisión, una de las cuales recogió casi 60.000 comentarios, con lo que se sitúa entre las consultas de la Unión con mayores niveles de participación. Las instituciones de la Unión también han llevado a cabo un trabajo significativo, incluidos numerosos dictámenes científicos publicados por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), en apoyo de la revisión”, prosiguen.

Por estas razones, los grupos parlamentarios instan al Gobierno a solicitar a la Comisión Europea una propuesta de reglamento para cada uno de estos temas: bienestar de los animales en cautividad con fines económicos; protección de los animales en el momento del sacrificio; y etiquetado de productos alimenticios en materia de bienestar de los animales.

IMPACTO ECONÓMICO DE ESTAS MEDIDAS

Los parlamentarios recuerdan que, según la última evaluación de impacto inicial de la aplicación de las cuatro propuestas legislativas, se pueden extraer alguno datos de relevancia en cuanto al impacto económico en la UE. 

Si bien “se espera que la mejora de las normas de bienestar animal de la UE aumente a corto plazo los costes de producción de las explotaciones”, cabe destacar que también “aportará beneficios tangibles, como una mayor calidad de la carne y seguridad alimentaria”. Asimismo, “los ganaderos se beneficiarán de una mayor productividad y del ahorro de costes derivado de un menor uso de medicamentos veterinarios y otros gastos”. 

Por otra parte, “el impacto económico de la eliminación progresiva de las jaulas dependerá de la duración del periodo transitorio y de la ayuda financiera a los ganaderos”. También señalan que “la mejora de las condiciones de bienestar animal también ofrecerá oportunidades económicas al contribuir a la segmentación del mercado y responder a la demanda de los consumidores y a las preocupaciones de los ciudadanos”.

Además, “la creciente percepción por parte de los consumidores de los métodos de producción sostenibles de la UE, a través de una etiqueta de bienestar animal, mejoraría la posición en el mercado de los productos que respetan el bienestar animal, ayudando a los consumidores a elegir con conocimiento de causa y, por tanto, crearía nuevas oportunidades de negocio”.

Finalmente, señalan que “la mejora y armonización de las normas de bienestar animal de la UE creará unas condiciones más equitativas y una competencia más leal entre las empresas de la UE en el mercado interior”.