La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de México (Semarnat), a través de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), el Departamento del Interior de Estados Unidos y el Departamento de Medio Ambiente de Canadá, firmaron una carta de intención para fortalecer la cooperación en la conservación del bisonte americano. Esta iniciativa busca restaurar los ecosistemas de pastizales y fomentar el uso tradicional de la biodiversidad, con un enfoque particular en la relación histórica entre el bisonte y los pueblos indígenas de América del Norte.
La carta de intención se formalizó en el marco de la reunión del Comité Trilateral para la Conservación y Manejo de Vida Silvestre y Ecosistemas, celebrada en San Diego, California. Este comité, que inició en 1996, reúne a autoridades federales, estatales y tribales, así como a organizaciones no gubernamentales y académicos para coordinar la conservación de especies compartidas en América del Norte. El acuerdo entre los tres países refuerza la colaboración transfronteriza en la protección del bisonte.
Al respecto, el titular de la Conanp, Humberto Adán Peña Fuentes, expresó la satisfacción de México en formar parte de este acuerdo trilateral, ya que "la permanencia de los bisontes en los territorios que históricamente han ocupado representa hoy un programa exitoso de reintroducción de esta especie a nuestro país, en la cual participan aliados de la conservación como las comunidades locales, científicos y el equipo de la Conanp, entre otros".
Asimismo, subrayó que "la participación de nuestro país en esta iniciativa de carácter trilateral refuerza los lazos hermanos entre los tres países".
Matthew Strickler, subsecretario adjunto de Pesca y Vida Silvestre y Parques del Departamento del Interior de EE.UU., destacó la importancia de este acuerdo. “El bisonte americano es una especie clave e icónica de América del Norte y nuestro mamífero nacional”, afirmó. “Esta cooperación trilateral consolidará los esfuerzos conjuntos para conservar el bisonte y mejorar una variedad de sistemas ecológicos que benefician tanto a la especie como a las personas que la valoran”.
La carta de intención tiene como objetivos fortalecer la coordinación para la conservación del bisonte y la restauración de pastizales en los tres países; promover políticas y prácticas efectivas para la conservación biocultural del bisonte; desarrollar planes de trabajo conjuntos dentro del Comité Trilateral; fomentar el intercambio de información técnica entre los tres países y, mejorar los informes sobre las actividades realizadas bajo el acuerdo.
ACCIONES PARA CUIDAR DE LOS BISONTES
En México, la Conanp ha liderado importantes esfuerzos de restauración del bisonte. En 2009, en colaboración con el Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y The Nature Conservancy (TNC), se estableció la primera manada de conservación en la Reserva de la Biosfera Janos, gracias a una donación de 23 bisontes del Servicio Nacional de Parques de Estados Unidos. En 2019, se actualizó el Plan de Acción para la Conservación del Bisonte Americano, con el objetivo de restaurar su papel ecológico y recuperar los pastizales de su área de distribución histórica en México.
Una segunda manada fue establecida en el Área de Protección de Flora y Fauna Maderas del Carmen en 2019, en colaboración con el Fondo Mexicano para la Conservación de la Naturaleza y CEMEX. Actualmente, las dos manadas mexicanas cuentan con más de 400 bisontes, lo que requiere redoblar los esfuerzos para asegurar la recuperación de la especie.
En Estados Unidos, el Departamento del Interior lanzó en 2020 la Iniciativa de Conservación del Bisonte, centrada en cinco objetivos clave: salud de las manadas silvestres, conservación genética, gestión compartida, restauración ecológica y cultural. Con más de 25 millones de dólares asignados en 2023, el Departamento está trabajando con socios federales y tribales para utilizar la mejor ciencia disponible y los conocimientos indígenas en la restauración de pastizales y la recuperación del bisonte.
El bisonte americano, que una vez se extendió desde los pastizales del norte de México hasta el interior de Alaska y las llanuras de Canadá, fue llevado al borde de la extinción tras la colonización europea, cuando su población cayó de 60-80 millones a solo 1,000 animales. Gracias a los esfuerzos de conservación, los bisontes sobrevivientes se convirtieron en la base de varias poblaciones protegidas, lo que ha permitido su recuperación.
Sin embargo, hoy en día el bisonte sigue ausente en el 99 % de su área de distribución histórica. La mayoría de los bisontes en América del Norte se encuentran en manadas confinadas por cercas y aisladas entre sí, lo que plantea desafíos para su integridad genética y viabilidad a largo plazo. Actualmente, México, Estados Unidos y Canadá protegen aproximadamente a 31,000 bisontes, con el objetivo de restaurar su papel ecológico en los pastizales nativos y su importancia cultural para los pueblos indígenas.
La firma de esta carta de intención representa un esfuerzo de diplomacia ambiental, subrayando la cooperación internacional en la conservación de la biodiversidad. Al unir a México, Estados Unidos y Canadá en un objetivo común de restauración ecológica, el bisonte se convierte en un símbolo de reconciliación entre las sociedades humanas y la naturaleza, y en un modelo para la acción concertada en la preservación de nuestro patrimonio compartido.
Al reafirmar su compromiso por la conservación, la Semarnat y la Conanp subrayan que la colaboración entre México, Estados Unidos y Canadá constituye un avance fundamental en la protección de la biodiversidad y es un apoyo para afrontar los desafíos ambientales que se les presenten.