Advierten del problema del comercio ilegal de mascotas y del abuso de la ley actual por parte de los comerciantes

La Comisión Europea ha publicado hoy su informe de 2023 sobre la Red de Alerta y Cooperación, que facilita la cooperación y el intercambio de información entre los Estados miembros sobre los controles oficiales en la cadena agroalimentaria. El informe revela un aumento significativo de las notificaciones en comparación con 2022, lo que demuestra el crecimiento de la cooperación entre los Estados miembros en este ámbito.

La Red de Alerta y Cooperación está compuesta por cuatro subredes, cada una con un enfoque individual.

El Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (RASFF) facilita el intercambio rápido de información entre las autoridades de seguridad alimentaria sobre los riesgos para la salud relacionados con los alimentos, los piensos o los materiales en contacto con los alimentos. En 2023, hubo un aumento del 8 % en las notificaciones del RASFF, con un total de 4.695 notificaciones. Como en años anteriores, el problema más notificado en el RASFF se refería a los residuos de plaguicidas, seguido de cerca por los microorganismos patógenos. Los principales países que notificaron siguieron siendo Alemania, los Países Bajos y Bélgica.

Los plaguicidas más comunes notificados fueron clorpirifós (299), acetamiprid (75), óxido de etileno y 2-cloroetanol (67). En comparación con 2022, el número Los casos de metil-clorpirifós, óxido de etileno y 2-cloroetanol se redujeron en un 60 % aproximadamente, mientras que los de clorpirifós aumentaron un 19,1 %.

En el caso de los microorganismos patógenos, las categorías de alimentos más notificadas siguieron siendo la carne de ave y los productos cárnicos de ave (316) y los frutos secos, productos de frutos secos y  semillas (93). Siguiendo la misma tendencia que en 2022, Salmonella fue el microorganismo patógeno más frecuente (582 notificaciones), seguido por Listeria monocytogenes (131), Escherichia coli (50) y norovirus (50), todos detectados principalmente en productos de origen animal.

El componente de asistencia administrativa y cooperación (AAC) permite a los Estados miembros notificar infracciones de la legislación de la UE en materia de seguridad alimentaria que no supongan un riesgo para la salud. En 2023, se registró un aumento del 24 % en las notificaciones de AAC, con 3.166 notificaciones.

La mayoría de las notificaciones de la AAC en 2023 estuvieron relacionadas con frutas y verduras que no cumplían con las normas, nuevamente debido principalmente a residuos de pesticidas, seguidas de casos de etiquetado incorrecto, como declaraciones de propiedades saludables no autorizadas para complementos alimenticios.

En su primer año de funcionamiento, la Red de Sanidad Vegetal generó 128 notificaciones, ya que los Estados miembros compartieron detalles sobre envíos de plantas, productos vegetales y otros artículos (como semillas, frutas, verduras, madera y flores) que no cumplían con las normas y otros problemas relacionados con la sanidad vegetal.

COMERCIO ILEGAL DE PERROS Y GATOS

La Red contra el Fraude Agroalimentario registró un aumento del 26 % en las notificaciones, con 758 sospechas de fraude. El comercio ilegal de perros y gatos siguió siendo un problema importante. Durante el año 2023, se crearon directamente en la Red contra el Fraude Agroalimentario un total de 414 notificaciones relacionadas con el comercio y los movimientos ilegales de perros y gatos. Además, se notificaron 87 incumplimientos, de los cuales 45 representaban una sospecha de prácticas fraudulentas. Los países que crearon más notificaciones fueron Alemania, Austria, Eslovenia, Bélgica e Italia. En cuanto al origen de los animales, los principales proveedores dentro de la UE fueron Rumanía, Hungría, Polonia y Bulgaria. El 37 % de las notificaciones se referían a animales procedentes directamente de países no pertenecientes a la UE, principalmente de Bielorrusia/Rusia, Ucrania, Serbia y Turquía.

Estas notificaciones se referían principalmente a infracciones graves, como la falsificación de documentos (pasaportes de animales de compañía de la UE, certificados zoosanitarios, resultados de titulación de la vacuna antirrábica), que consiste en proporcionar información falsa sobre la edad, el origen o el estado de vacunación antirrábica de perros y gatos. Además, 72 notificaciones mencionaban directamente la publicidad y compra de animales a través de plataformas en línea, que actualmente sirven como canal de venta principal. Además, 114 notificaciones destacaban preocupaciones transfronterizas en materia de bienestar animal a pesar de que no es obligatorio declarar cuestiones relacionadas con el bienestar animal.

Las acciones llevadas a cabo han confirmado que "una proporción significativa de comerciantes abusan de la legislación de la UE sobre los desplazamientos no comerciales de animales de compañía para encubrir actividades comerciales". Según recogen en el informe, se aprovechan de normas de control menos estrictas y evadiendo impuestos, ya que la legislación actual permite a los propietarios de mascotas viajar con hasta cinco animales en un marco de control e impuestos más flexible. También se sospecha que algunos refugios o asociaciones de protección de animales se aprovechan de su estatus para criar o comerciar ilegalmente con perros de países no pertenecientes a la UE a través de anuncios y ventas en línea por una "cuota simbólica" de unos pocos cientos de euros para cubrir supuestos costes de transporte o cuidado

Otras sospechas estaban relacionadas con la sustitución de carne, la adulteración de la miel y el aceite de oliva mal etiquetado. Además, 1.075 notificaciones de la AAC y 1625 notificaciones del RASFF fueron señaladas como posibles fraudes, lo que dio lugar a inspecciones o investigaciones más profundas por parte de los Estados miembros.