Con el propósito de fortalecer la preparación y capacidad de respuesta frente a emergencias zoosanitarias, es decir, por enfermedades que se transmiten de animales a humanos, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO Colombia) llevó a cabo el Taller Nacional de Buenas Prácticas de Gestión de Emergencias, en el que participó el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA.
El taller, que se realizó durante cinco días en Villa de Leyva, Boyacá, busca mejorar la preparación nacional contra emergencias zoosanitarias y fortalecer la capacidad para pronosticar, prevenir, detectar y responder a amenazas que impactan la salud humana y animal.
La capacitación, desarrollada por expertos facilitadores de la FAO, provenientes de Roma, Italia, contó con la participación de instituciones clave como el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), el Ministerio de Salud, Ministerio de Ambiente, Ministerio de Agricultura, el Instituto Nacional de Salud, el Invima, OPS/OMS Colombia, Parques Nacionales Naturales, la Policía Nacional, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, Fuerzas Militares, Academia y Corporaciones Autónomas Regionales.
Durante la apertura, los médicos veterinarios zootecnistas de la Subgerencia de Protección Animal del ICA, Diana Dallos y Miller Cortés, presentaron un panorama sobre las amenazas zoosanitarias en el país, con especial enfoque en el Programa de Encefalitis Equinas.
A lo largo del taller, se abordaron principios fundamentales de gestión de emergencias, incluyendo acciones de prevención, detección, respuesta y recuperación, esenciales durante todas las fases de una emergencia zoosanitaria.
“Esta capacitación es parte de un esfuerzo conjunto para mejorar la preparación y la capacidad de respuesta de Colombia frente a posibles emergencias zoosanitarias. Se han proporcionado herramientas clave para la vigilancia y manejo de enfermedades como la encefalitis equina, cuyo control es vital para la salud animal y la prevención de su propagación”, señaló Edilberto Brito Sierra, subgerente de Protección Animal del ICA.
El funcionario agregó que el aumento de los movimientos transfronterizos, cambios agroecológicos y la intensificación de sistemas de producción han incrementado el riesgo de enfermedades emergentes y reemergentes. Ante este escenario, la metodología de Buenas Prácticas de Gestión de Emergencias (GEMP) de la FAO se presenta como una estrategia integral para que Colombia pueda hacer frente a estos desafíos de manera efectiva.
Finalmente, se enfatizó en la importancia de la planificación, la capacitación y el equipamiento adecuado para estar preparados ante cualquier alerta de emergencias zoosanitarias, asegurando así la protección de la sanidad animal y la salud pública en el país.