Tras 20 años regresan casos de rabia a Campeche

De acuerdo con la médica veterinaria zootecnista Gloria Cortéz, el último caso de rabia reportado en una mascota en Campece fue hace más de 20 años, sin embargo, días atrás, en Ciudad del Carmen, el doctor Daniel Can recibió a un gato de aproximadamente tres meses de edad inicialmente con un cuadro de letargia e hipotermia.

"Conforme el cuadro se iba agudizando, el equipo médico empezó a notar sensibilidad a la luz y a los ruidos, lo cual alertó al personal que atendió al paciente y empezó la investigación", expresó Cortéz. Tras analizar el estatus sanitario y procedencia del animal en conjunto con los signos clínicos que presentaba, se dieron a la tarea de conversar con los propietarios del felino para sugerir eutanasia ante una alta sospecha de rabia.

"Se hizo un llamado a las autoridades sanitarias para que el animal fuera analizado, posteriormente el resultado de laboratorio confirmó la sospecha, el paciente dio positivo a rabia", explicó la médica veterinaria. “La familia del gato, el doctor y su equipo ya están siendo atendidos y vacunados, la autoridad ya está realizando su cerco sanitario para dar vigilancia”, agregó.

Ante esto, Cortéz consideró importante aclarar que "la rabia es una enfermedad prevenible y 99 % mortal, la forma de prevenirla es a través de la vacunación de los animales", es decir, mediante la inoculación de aquellas especies más cercanas a las personas que son los perros y gatos. "Adicional la vacunación de personas en riesgo y evitar mordeduras", añadió.

Asimismo, la doctora subrayó que "el virus de la rabia es neurotrópico, esto quiere decir que tiene una afinidad por el sistema nervioso; por eso las personas y animales que se infectan están incoordinadas, presentan salivación, fotosensibilidad, fase de furia dependiendo de la especie e hidrofobia, este último por parálisis de músculos y laringe".

Finalmente, Cortéz señaló que los gatos no son reservorios del virus como otras especies, sino son considerados intermediarios, “esto quiere decir que se pueden infectar por peleas con otros animales infectados o al depredar especies que están infectadas. Por eso los veterinarios nos cansamos de decirles que tanto perros como gatos deben estar en resguardo y salir de paseo con vigilancia”.

“Cuando les decimos que no estén recogiendo animales de la calle no lo hacemos por maldad, sabemos que es feo que un animal esté en condición de calle pasándola mal, pero ustedes al no tener conocimientos de cómo pueden prevenir enfermedades de este tipo, lo más sano es no hacerlo, porque se arriesgan a enfermarse de cualquier cosa, no solo de rabia”, concluyó.