Un nuevo estudio reveló un hallazgo preocupante: menos del 40 % de los perros en el estudio longitudinal Golden Retriever Lifetime estaban tomando medicamentos preventivos contra el gusano del corazón al inicio del estudio. Este es un descubrimiento preocupante, ya que la dirofilariosis es una afección grave y potencialmente mortal que se puede prevenir en los perros.
Esa investigación, realizada por investigadores de la Lincoln Memorial University, investigó qué factores predicen el uso de medicamentos preventivos contra el gusano del corazón en los golden retrievers de la cohorte del estudio. El equipo descubrió factores críticos asociados con una probabilidad reducida de que los perros reciban prevención contra el gusano del corazón, incluidos perros en el cuartil más alto de altura, perros sexualmente intactos y perros que reciben suplementos.
Por el contrario, los perros que recibieron otras vacunas o fueron diagnosticados con una enfermedad infecciosa o un problema de salud de oído, nariz o garganta durante sus controles médicos en el último año tenían más probabilidades de recibir preventivos contra el gusano del corazón.
Lauren Wisnieski, profesora asociada de Salud Pública e Investigación en la Universidad Lincoln Memorial e investigadora principal del estudio, enfatizó la escasez de estudios que examinen la prevalencia del uso profiláctico en perros. "Este proyecto reciente es especialmente crucial ya que el cambio climático ha extendido la temporada de mosquitos en ciertos estados, lo que hace imperativa la vigilancia durante todo el año", señala.
Las larvas del gusano del corazón se depositan en la piel de un perro o gato durante la picadura de un mosquito, donde maduran, a veces durante varios meses. A pesar de los avances en la comprensión de la dirofilariasis, incluidas pruebas de diagnóstico mejoradas y tratamientos más seguros y eficaces, la dirofilariosis sigue siendo una amenaza importante para la salud de las mascotas.
Los gusanos del corazón pueden crecer varios centímetros de largo y causar daños graves al corazón, los pulmones y otros órganos. Si bien el tratamiento es posible, puede resultar costoso financieramente para los dueños y, a menudo, significa una larga recuperación, si tiene éxito, para la mascota.
"Estos datos pueden ayudar a informar cómo los veterinarios hablan con los clientes", expresa Wisnieski. "También puede ayudar a identificar poblaciones que tienen riesgos de incumplimiento. La prevención es una alternativa más barata a la carga financiera que supone tratar la dirofilariosis más adelante".
Con estos datos preliminares, el equipo trabajará para ampliar el alcance de su investigación. Esta expansión abarcará diversas razas de perros, los que reciben suplementos, el impacto del costo en el uso preventivo y el efecto del vínculo entre humanos y animales.