Las Comisiones Unidas de Procuración y Administración de Justicia y de Protección Ambiental y Cambio Climático del Congreso mexiquense retomaron el análisis de la iniciativa del grupo parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD), para imponer hasta cinco años de prisión a quien solicite o lleve a cabo intervenciones quirúrgicas en animales con propósitos estéticos, cuyo fin sea alterar su apariencia o conseguir otros fines no médicos o curativos.
En reunión presidida por el diputado Gerardo Ulloa Pérez (Morena), la legisladora Luz Ma Hernández Bermúdez expuso la iniciativa de reforma a los códigos Penal y para la Biodiversidad que también propone hasta cuatro años de cárcel a quien incurra en prácticas que causen sufrimiento y dolor a los animales domésticos, callejeros o en situación de abandono, mediante sustancias tóxicas o métodos abrasivos para su envenenamiento.
La pena máxima aplicaría cuando se solicite o se lleve a cabo el corte total o parcial de la cola o de las orejas, la sección de las cuerdas vocales, la extirpación de uñas y dientes, la amputación de las falanges, entre otras.
Además, la bancada del PRD plantea que los animales en situación de abandono y callejeros no sean considerados plaga y que también se impongan hasta cinco años de prisión a quien les cause la muerte con dolo.
"La iniciativa busca garantizar un trato justo a los animales, toda vez que se estima que 70 % de los perros callejeros del país se ubican en la entidad, además de que México ocupa el tercer lugar en maltrato animal en el mundo y el primero en Latinoamérica".
Durante la reunión, la diputada Viridiana Fuentes Cruz (PRD) lamentó el alto índice de impunidad en el maltrato animal, llamó a sumar esfuerzos para evitarlo y recordó que en la primera reunión de trabajo solicitaron la contribución de la Fiscalía General de Justicia a fin de fortalecer la iniciativa de ley.
Asimismo, solicitó incorporar al análisis la iniciativa de su grupo parlamentario para eficientar la prevención, atención y sancionar los casos de maltrato animal como el de Sergio “N”, policía de la Ciudad de México quien hace unos meses arrojó a un cazo con aceite hirviendo a un lomito llamado ‘Benito’.
La propuesta de reforma a los códigos Penal, Administrativo y para la Biodiversidad de la entidad, se basa en el principio de que "los animales tienen derechos y de que la legislación enfocada a su protección tiene un impacto directo en su calidad de vida y de las personas, pues es, además, reflejo de los valores de la sociedad".