Entre los nematodos transmitidos por mosquitos, el género Dirofilaria es muy importante desde una perspectiva veterinaria y de salud pública. Las dos especies principales, D. immitis y D. repens, agentes causantes de la dirofilariosis subcutánea y la dirofilariosis canina, respectivamente, tienen una amplia distribución y pueden infectar una gran variedad de especies hospedadoras carnívoras, domésticas y silvestres.
La dirofilariasis subcutánea es una enfermedad zoonótica causada por Dirofilaria repens que afecta principalmente a los perros, tanto domésticos como salvajes, y a los humanos. Se trata de una enfermedad transmitida por vectores y en humanos suele presentarse como una inflamación local a nivel subcutáneo que forma un nódulo donde el parásito es encapsulado y destruido.
Dirofilaria repens es el principal agente causal de la dirofilariasis en América del Sur, con crecientes reportes del parásito en países donde no ha sido identificado previamente, debido a varios factores como la expansión de la distribución geográfica de los mosquitos vectores.
Al utilizar cebadores de nuevo diseño para la detección molecular y la confirmación a través de la secuenciación de próxima generación, un estudio realizado conjuntamente por investigadores de Colombia y Chile ha informado los primeros casos plausibles de D. repens en perros de Colombia.
El hallazgo “respalda la clasificación de esta especie como un patógeno emergente en las Américas”, e instan a “incrementar los esfuerzos de diagnóstico y vigilancia para prevenir y controlar los casos actuales y futuros de dirofilariasis en esta región”.