La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), por orden de la Comisión Europea, tiene la misión de generar análisis epidemiológicos anuales de la propagación y el impacto de la peste porcina africana (PPA) Genotipo II en la Unión Europea (UE) y los países vecinos afectados por la enfermedad.
En este contexto, se invitó a los países afectados a presentar a la EFSA los resultados de las pruebas de laboratorio de las actividades de vigilancia de la peste porcina africana y la información sobre la población porcina, gracias a los cuales la Agencia ha realizado un informe epidemiológico de la enfermedad durante el 2022.
Coincidiendo con los cambios normativos y una importante disminución de los brotes de peste porcina africana en 2022 en la UE, el informe explica que el número de muestras de cerdos domésticos analizadas como parte de la vigilancia activa disminuyó en un 80 %, mientras que el número de muestras de vigilancia pasiva casi se duplicó en comparación con 2021.
La mayoría de los brotes entre los cerdos domésticos en la UE “se detectaron mediante pruebas de sospecha clínica (93 % de los brotes), seguidas de actividades de rastreo (5 %) y pruebas semanales de los primeros cerdos muertos por cada explotación (2 %).
Aunque la mayoría de las muestras de jabalí provenían de animales cazados, el informe considera que la probabilidad de detectar animales PCR positivos fue mucho mayor en los jabalíes encontrados muertos.
Los brotes de peste porcina africana entre los cerdos domésticos en la UE se redujeron en un 79 %, mientras que se observó una disminución del 40 % en los casos de jabalíes en comparación con 2021.
Este hecho fue muy marcado en Rumanía, Polonia y Bulgaria, con una reducción del 50-80 %. en comparación con 2021. En muchos países, a su vez, se observó una disminución importante en el número de explotaciones porcinas, especialmente de establecimientos pequeños con menos de 100 cerdos.
Asimismo, “la incidencia regional entre la granja y la proporción de cerdos perdidos debido a la peste porcina africana en la UE fue en general muy baja (promedio del 1 %), excepto en algunas regiones de Rumanía”.
En resumen, el informe concluye que “el impacto de la peste porcina africana en las poblaciones de jabalíes fue variable, observándose una disminución en la abundancia de jabalíes en ciertos países frente a una población estable o incluso aumentada”.