El Plan Nacional de Prevención, Vigilancia y Control de las Enfermedades transmitidas por Vectores posibilitará la realización de nuevos mapas de riesgo y la adopción de medidas adaptadas a cada escenario desde un enfoque ‘One Health’ o ‘Una sola salud’.
Así lo ha subrayado la ministra de Sanidad, Carolina Darias, durante su intervención en la jornada de presentación de esta estrategia frente a enfermedades transmitidas por vectores como el dengue, el paludismo, la fiebre del Nilo occidental o la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo.
La ministra ha defendido la necesidad de aplicar un enfoque más amplio ante los retos actuales y futuros para la salud de estas enfermedades, que incluya las nuevas realidades globales asociadas a factores tan importantes como la movilidad, el comercio internacional o el cambio climático.
Determinantes, ha subrayado Darias, cuyas consecuencias incrementan las posibilidades de que enfermedades infecciosas transmitidas por vectores puedan prosperar y den lugar a nuevas alertas, sobre todo, en el sur de Europa.
Por ello, y con el fin de poder detectar precozmente nuevas olas y controlar sus efectos, ha insistido en la relevancia de desarrollar sistemas de vigilancia bajo un enfoque ‘One Health’ que abarquen tanto el seguimiento y control en personas, como en animales domésticos y silvestres.
A ello se sumaa la vigilancia entomológica para la detección y cuantificación de los vectores y la integración de estos datos con información clave como las predicciones climatológicas o los usos del suelo.
PRIMERA FASE Y CIENCIA CIUDADANA
Como ha recordado la ministra de Sanidad, las transmitidas por vectores constituyen el grupo de enfermedades que más está creciendo en el mundo y España, que cuenta con experiencia en la eliminación de este de enfermedades, cuenta también con retos actuales en este sentido.
Retos y enfermedades relacionadas con vectores como los mosquitos Culex, Aedes y Anopheles a los que se suman enfermedades emergentes vinculadas a la introducción de agentes infecciosos a través de aves migratorias y otros animales.
Por ello, como ha detallado Darias, la primera fase del Plan Nacional estará centrada en las enfermedades y riesgos producidos por mosquitos de los géneros Culex y Aedes, con el objetivo de seguir mejorando el excelente trabajo de los diferentes Servicios de Control de Mosquitos durante sus más de 40 años de trabajo junto con redes nacionales como la red EVITAR, pionera en la vigilancia vectorial en el siglo XXI en nuestro país.
Otro de los elementos relevantes del Plan son las iniciativas de ciencia ciudadana, que permitirán la participación de cualquier persona en la vigilancia y el control de los vectores con el respaldo de expertos que validarán la información a través aplicaciones móviles y la elaboración de nuevos modelos y mapas de riesgo.
Plan Nacional de Prevención, Vigilancia y Control de las Enfermedades transmitidas por Vectores está alineado con otras estrategias desarrolladas por el Gobierno de España, como el Plan Estratégico de Salud y Medio Ambiente (PESMA) o el Programa de Vigilancia de la Fiebre del Nilo occidental desarrollado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Asimismo, el Plan Nacional se ha visto implementado por la Declaración de Zaragoza sobre Vigilancia en Salud Pública, aprobada en marzo 2022, que además completan la labor de reforma del Sistema de Salud Pública, junto con la creación de la primera Estrategia de Salud Pública de la historia del SNS y de un nuevo sistema de Vigilancia de la Salud Pública.
En todas ellas, está presente el enfoque ‘One Heath’, que promueve la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que, como ha recordado Darias, será una de las prioridades en materia sanitaria en la agenda de la Presidencia de España al Consejo de la UE, con el objetivo de impulsar un enfoque comunitario que abarque la salud humana, animal y del medio ambiente en general.