Manifestación 5 de marzo: "Los veterinarios somos sanitarios”

Veterinarios de numerosas regiones del país se han reunido hoy, a las puertas del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (Madrid), en rechazo al Real Decreto 666/2023, de 18 de julio, por el que se regula la distribución, prescripción, dispensación y uso de medicamentos veterinarios.

La Federación Estatal de Sindicatos Veterinarios (FESVET) y la Confederación Empresarial Veterinaria Española (CEVE) han sido los encargados de convocar esta concentración bajo el lema Por la derogación del RD 666/2023. Por una ley del medicamento que permita dispensar como en el resto de Europa.

La concentración, que ha iniciado a las 10 horas, ha reunido a una gran multitud de profesionales de la Veterinaria, que han vitoreado a coro numerosos lemas, como el de "los veterinarios somos sanitarios”. 

Rafael Laguens, ex presidente de la Asociación Mundial Veterinaria (WVA), ha declarado para Diario Veterinario que “hay que buscar una solución para que los veterinarios, especialmente los de animales de compañía, puedan ejercer su labor y utilizar los medicamentos de una manera razonable, en la que los propietarios de mascotas no tengan que vagar de una farmacia a otra para tratar a sus animales”. Finalmente, ha añadido que, en su opinión, “falta un sistema de dispensación de medicamentos razonable; simplemente hay que sentarse a hablar y buscar un mejor sistema”. 

A su vez, Carla Aguirre, presidenta de la Asociación de Veterinarios Especialistas en Équidos (AVEE), ha comentado a este medio que el Real Decreto “es una normativa que se ha trasladado mal de Europa”. Igualmente, ha recalcado que esta norma coarta el criterio clínico del veterinario y, al final, la vida de muchos animales se pone en riesgo”. “Somos todos veterinarios y lo que tenemos que hacer es luchar por la salud y el bienestar de los animales y lo que está claro es que este Real Decreto impone una serie de normativas que te dicen cómo tienes que hacer tu trabajo clínico y, en muchos casos, lo que está causando es un aumento de mortalidad y situaciones muy complejas”, ha observado la presidenta de la organización equina.

A las 11 am se ha hecho una lectura del manifiesto, en la que se ha reivindicado que la labor del veterinario es esencial para la salud animal y la salud pública. “Todos los centros veterinarios son centros sanitarios. Si embargo, la legislación vigente ignora la realidad veterinaria y obstaculiza nuestra labor. Cada especie animal tiene necesidades específicas, pero la normativa impone un sistema único de prescripción sin flexibilidad. Esto limita nuestra capacidad para ofrecer tratamientos adecuados y compromete la recuperación de nuestros pacientes”, ha señalado Tania Omcís, representante del Colegio de Veterinarios de Madrid y de Fesvet, durante su discurso.

También ha habido una reivindicación del IVA reducido, pues mientras la sanidad humana sí lo tiene, “los servicios veterinarios están gravados con un 21 %, encareciendo los tratamientos y dificultando su acceso, en especial a los más vulnerables", ha comentado Omcís antes de subrayar que "la salud animal no es un lujo”.

Manuel Martínez Domínguez, presidente de la Federación Estatal de Sindicatos Veterinarios (Fesvet), ha señalado por su parte que el Ministerio de Sanidad está haciendo una “dejación de funciones”, pues la Veterinaria es una profesión sanitaria. “Estamos hablando de Salud Pública y, por tanto, la salud tiene que ser gestionada por el Ministerio de Sanidad”. 

“Queremos prescribir y dispensar con criterio”, ha añadido Tania Omcís, quien ha recordado que “en toda Europa, los veterinarios pueden, no solamente prescribir, sino administrar los tratamientos completos”.

Finalmente, Sebastià Rotger, presidente de la Confederación Empresarial Veterinaria Española (CEVE), ha añadido que “no vamos a parar” hasta cumplir estos cuatro requisitos: la derogación del Real Decreto 666/2023; una ley del medicamento que “se ajuste realmente al reglamento europeo”; la reducción del IVA; y la inclusión en Sanidad.  

Cabe destacar que, tras la concentración, los promotores se han reunido para valorar la manifestación y hacer una programación de futuras acciones.