​Veterinarios españoles, cada vez más estresados y preocupados mientras que los de otros países ganan satisfacción laboral

Los veterinarios en España siguen mostrando altos niveles de preocupación, lo que concuerda con el hecho de que los salarios de estos profesionales son particularmente bajos en el país, en comparación con el resto de la Unión Europea.

Esta es una de las conclusiones que se desprende del tercer informe de CM Research, que hace un análisis del impacto del coste de vida en los veterinarios y dueños de mascotas de Reino Unido, Estados Unidos, Francia, España, Alemania e Italia. Para este estudio, se ha realizado una encuesta a unos 400 tutores de mascotas por país y a entre 100 y 150 veterinarios. En el caso de España, se ha entrevistado concretamente a 100 veterinarios y 404 tutores.

PREOCUPACIÓN POR EL ALTO NIVEL DE VIDA Y EL COSTE DE LAS HIPOTECAS
 

El 84 % de los veterinarios españoles se muestran preocupados por su situación económica y el coste de vida. Esto implica un aumento significativo con respecto a 2023, cuando se indicaba que un 72 % (12 % menos que en la actualidad) de los veterinarios estaban, en alguna medida, preocupados por el aumento del coste de vida.

En este contexto, un 49 % de los veterinarios españoles declara que sus preocupaciones tienen que ver con el impacto de la profesión en su nivel de vida. Ahora bien, entrando más en detalles, un 48 % de los encuestados especifica que está preocupado por el coste de la hipoteca o alquiler. Es destacable que este porcentaje se haya incrementado respecto a la anterior encuesta.

Esta situación ha provocado que un 64 % de veterinarios españoles tengan que pensar en su bolsillo y, por tanto, reduzcan en sus gastos personales. Cabe subrayar que este ahorro ha representado una tendencia creciente desde 2022, tanto en España como en Reino Unido, Francia y Estados Unidos.

Llegados a este punto, el informe sorprende con un dato curioso: mientras que en las encuestas del 2022 y 2023 solo un 19 % y 18 % de los encuestados afirmó haber pedido un incremento de salario, en la encuesta actual lo ha pedido un 30 % de los entrevistados, lo que supone un aumento notorio.

LOS VETERINARIOS ESPAÑOLES SON LO QUE MÁS PIENSAN EN DEJAR LA PROFESIÓN
 

Uno de los datos más demoledores del informe señala que más de un tercio de los veterinarios en España están considerando dejar la profesión por un trabajo mejor pagado o de menos horas. Este problema, además, ha ido en aumento en los últimos años, pasando de un 30 % en 2022 a un 38 % en 2024.

Es remarcable la diferencia de esta estadística con respecto al resto de países encuestados. Mientras que en Reino Unido hay un 25 % de veterinarios que valoran dejar la profesión, en EEUU solo hay un 16 % y en Francia un 12 %. Esto concuerda con los datos que demuestran que la satisfacción laboral en estos países ha ido aumentando progresivamente, mientras que en España se ha estancado y se mantiene medianamente estable (con un 51 % de veterinarios satisfechos con su carrera actualmente).

En línea con esto, el informe visibiliza que los veterinarios españoles son los que están más estresados (73 % de los encuestados). De hecho, España es el único país que refleja niveles de estrés mayores a los registrados durante la pandemia de Covid-19.

IMPACTO EN LOS NEGOCIOS VETERINARIOS
 

Los ingresos obtenidos a través de servicios y consultas en España han aumentado este año un 32 %. En contra, los ingresos obtenidos a través de productos de nutrición para mascotas se han reducido otro 32 %. Sin embargo, han aumentado el número de altas de nuevos clientes (+23 %) y el número de citas presenciales (+27 %). La disponibilidad del personal, por su parte, se ha reducido un 13 %. 

Cabe destacar a este respecto que la disponibilidad de personal y la afluencia de público siguen añadiendo presión adicional a los veterinarios, especialmente en el Reino Unido, EEUU y España.

Por otra parte, el informe destaca que los servicios básicos están siendo reemplazados por alternativas más baratas, mientras que los tratamientos complementarios, como los nutracéuticos y los tratamientos alternativos, las terapias, así como la nutrición, están disminuyendo.

Sin embargo, mientras que en España hay un 25 % más de veterinarios que confirman que están ofreciendo alternativas de medicamentos más baratas, en el resto de países la cifra es mayor (llegando a un 64 % en Reino Unido). Por otra parte, un 27 % menos de veterinarios están ofreciendo terapias alternativas como hidroterapia, acupuntura o fisioterapia.

Asimismo, cabe destacar que la demanda de seguros privados ha aumentado en España.
 

IMPACTO EN LOS PROPIETARIOS DE MASCOTAS
 

El porcentaje de propietarios de mascotas que están luchando por pagar los costes veterinarios se ha mantenido estable, incluso ha descendido ligeramente (33,5 % actual con respecto al 35,2 % del primer informe).  

En el caso de que se encuentren con propietarios que no pueden pagar, el 61 % de los veterinarios encuestados ofrece alternativas de tratamiento más baratas, sumado a un 52 % que ofrece medicamentos más baratos. Además, hay un 17 % de veterinarios que recomienda a los clientes acudir a asociaciones de caridad.

Por otra parte, alrededor de la mitad de los veterinarios encuestados confiesa que han notado que sus clientes están: reduciendo la frecuencia de sus visitas; comprando medicamentos en línea; preguntando por tratamientos más baratos; y buscando sobre los tratamientos en internet antes de la visita.

Aun así, los retrasos en los tratamientos han descendido con respecto a los últimos informes. Cabe destacar que los tratamientos antiparasitarios son los que sufren más retrasos (lo notan un 46 % de los veterinarios). Ahora bien, hay igualmente un 46 % de veterinarios españoles que han notado que algunos de sus clientes no siguen las recomendaciones para así ahorrar gastos y, por tanto, detienen los tratamientos.

Dentro de los datos positivos, cada vez hay menos veterinarios españoles que afirman haber visto a dueños de mascotas que quieren desprenderse de estas por temas económicos (se ha reducido en un 11 %, llegando a la cifra de un 10 % de veterinarios que lo ha notado).