La médica veterinaria Vanda Santos, con 23 años de experiencia y distinguida con el título de Médico General en Medicina Felina por la ESAVS, entre otros posgrados del área, tiene un consultorio felino, "Casa do Gato", en Lavradio (Portugal), "una figura ineludible en el mundo de los felinos".
Su pasión por los gatos, su dedicación exclusiva a la medicina felina y su trabajo con dueños de gatos de distintos tipos la llevaron a sentir una necesidad: la necesidad de crear un espacio en el que pudiera ejercitarse y aplicar la medicina amigable con los gatos de la mejor manera posible. “La salud de nuestros gatos va más allá de las medidas médicas. Depende en gran medida de la capacidad de transmitir cuál es la esencia felina a nuestros dueños”, cuenta Santos. “Si los dueños entienden qué es un gato, sus necesidades y cómo podemos ayudarlos, podemos brindarles mejores condiciones y garantizar que tendremos gatos sanos y dueños felices”, añade.
Santos recomienda a sus clientes que inviertan en la alimentación que ofrece Ownat por varias razones. En primer lugar, explica que "la credibilidad y notoriedad ganada por la marca en los últimos años, las buenas relaciones institucionales con la marca, la consistencia en el mercado, la relación calidad-precio y la existencia de referencias que permiten el hecho de que las familias numerosas de gatos mantengan una alimentación de calidad son factores determinantes para creer en la marca”.
También refuerza que “la calidad de la gama sin cereales de varios sabores, con altos niveles de proteína animal que cubren las necesidades felinas y la adición de micronutrientes que favorecen la salud general me garantiza confianza para recomendar el producto”.
Además, menciona que encontró en Ownat una palatabilidad proporcional a lo deseable en una dieta “ad libitum”. “He estado siguiendo a cientos de gatos que comen exclusivamente Ownat durante 4 años y los resultados son claros. No puedo evitar recomendarlo. Desde entonces, he tenido una incidencia muy baja de pancreatitis, intolerancias alimentarias, gastroenteritis y mucha menos propensión a la obesidad, lo cual sabemos que es un problema en los gatos de interior”, enfatiza.
A lo largo de los años, Vanda ha demostrado ser una absoluta defensora de las gamas sin cereales. La objetividad con la que responde al “por qué” de esta apuesta es muy clara, “para alguien que practica exclusivamente la medicina felina, me parece una obviedad. Sabemos que las necesidades nutricionales de los felinos son particularmente diferentes: son carnívoros obligados, presentan un comportamiento depredador y tienen características metabólicas muy específicas. Utilizan principalmente proteínas de origen animal para mantener su metabolismo energético (…). Necesitan ciertos micronutrientes (arginina, taurina y muchos otros) que sólo existen en la proteína animal, siendo incapaz de producirlos (a diferencia de otras especies). Son muy ineficientes en el uso de los carbohidratos y cuando tienen que metabolizarlos alteran su metabolismo energético natural”. Agrega además que, “los cereales no forman parte en absoluto de la dieta natural de los felinos (…) entonces, ¿cuál es el motivo para utilizarlos? La humanidad ha domesticado, aunque sea parcialmente, a muchos gatos, pero no ha cambiado su fisiología y los dueños lo saben muy bien. Por supuesto, no daremos ratones, pájaros ni lagartijas a nuestros gatos, pero podemos ofrecerles alimentos que se ajusten a su fisiología natural”.
Así, concluye que “Ownat cumple con los requisitos que considero imprescindibles para recomendar comida real a nuestros felinos”.