Un estudio ha demostrado cómo las diferencias en el comportamiento de los ganaderos pueden afectar el control de la escala de los brotes de enfermedades. El comportamiento de los ganaderos, especialmente el uso de vacunas u otras medidas preventivas, es fundamental para determinar la eficacia de las respuestas a los brotes de enfermedades del ganado, como la fiebre aftosa, la tuberculosis bovina y la diarrea viral bovina.
Los investigadores han evaluado como las diferencias de comportamiento reportadas en el artículo deben tenerse en cuenta al planificar contingencias o desarrollar políticas para futuros brotes.
El equipo de investigación entrevistó a 60 ganaderos de todo el Reino Unido, investigando las decisiones de vacunación de los ganaderos en una epidemia que se desarrollaba rápidamente. El estudio encontró que la rápida vacunación estaba asociada con una alta confianza en los planes gubernamentales para el control de enfermedades, con suficiente tiempo, dinero y medios para controlar la enfermedad. Luego, el equipo incorporó esta información en un modelo matemático para todo el Reino Unido y estudió cómo el conocimiento del comportamiento de los ganaderos puede afectar las predicciones de brotes de enfermedades, en comparación con circunstancias en las que se ignoraban las diferencias en el comportamiento de los ganaderos.
Los investigadores han demostrado la utilidad de la modelización que tiene elementos tanto epidemiológicos como sociales y conductuales. El estudio revela cómo omitir las percepciones personales en los planes de manejo de enfermedades de los ganaderos individuales para las infecciones del ganado puede obstaculizar las evaluaciones y los planes de control.
EVALUACIÓN DE LAS ACTITUDES DE LOS GANADEROS
El valor del conocimiento conductual analizado en esta investigación “podría ser extremadamente útil en la planificación y administración de estrategias nacionales de control de enfermedades, permitiendo a las instituciones determinar con mayor precisión la escala y el coste de futuros brotes de enfermedades del ganado”.
"Nuestro estudio cuantitativo explora los comportamientos asociados a la salud veterinaria, capturando factores individuales y contextuales. Estos datos permiten que las diferencias en los comportamientos de manejo de enfermedades de los ganaderos se incluyan en los modelos de transmisión de enfermedades del ganado, lo que puede ayudar a informar la toma de decisiones de salud veterinaria”, añaden.
En este sentido, comprender los factores específicos asociados con las diferentes respuestas conductuales de los ganaderos ante los brotes de enfermedades “permitirá mejorar el diseño de estrategias de control de enfermedades teniendo en cuenta estos factores y las diferencias de comportamiento esperadas".
En resumen, el estudio ha demostrado “el poder y la necesidad de combinar predicciones epidemiológicas con una evaluación del comportamiento de los ganaderos. Ahora es necesario seguir trabajando para comprender cómo cambiarán con el tiempo las actitudes, percepciones y creencias de los ganaderos (y, por tanto, su comportamiento probable). También nos interesa comprender cómo las políticas, los consejos y las acciones de los ganaderos vecinos influyen en los comportamientos”.