La peste porcina africana (PPA) continúa representando una amenaza significativa para la industria porcina mundial, con impactos devastadores tanto en el bienestar animal como en la economía. Esta enfermedad viral altamente contagiosa, que afecta a cerdos domésticos y salvajes, causa fiebre hemorrágica severa, lo que lleva a altas tasas de mortalidad y no tiene vacuna aprobada. La peste porcina africana se ha propagado rápidamente por África, Asia y Europa. La capacidad de la enfermedad para cruzar fronteras y sus devastadoras consecuencias requieren un enfoque colaborativo y coordinado para controlar y prevenir su mayor difusión.
Reconociendo la urgencia de abordar este problema crítico, la FAO y el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), a través del Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal (APHIS) y el Servicio de Investigación Agrícola (ARS), celebraron recientemente una reunión para forjar una colaboración más sólida para mejorar la prevención y el control de la peste porcina africana. Los objetivos clave incluían compartir conocimientos y experiencias, explorar oportunidades de investigación y desarrollar estrategias conjuntas para fortalecer la respuesta contra la peste porcina africana.
"La peste porcina africana no conoce fronteras, y hacer frente a esta amenaza mundial requiere fomentar aún más la generación y el intercambio de conocimientos y herramientas científicas para contribuir a la prevención, el control y, cuando sea factible, la erradicación de la peste porcina africana a nivel regional y mundial", señaló Keith Sumption, oficial veterinario jefe de la FAO.
La reunión enfatizó la importancia de la acción colectiva y la necesidad de aunar recursos y experiencia para abordar de manera efectiva la propagación de la peste porcina africana y ayudar a los Estados miembros de la FAO a fortalecer sus medidas de control, sistemas de vigilancia y estrategias de respuesta. "La colaboración entre el USDA y la FAO en el control de la peste porcina africana es un paso fundamental en nuestros esfuerzos colectivos para combatir esta enfermedad devastadora. Al unir fuerzas, podemos aprovechar nuestra experiencia, recursos y redes para desarrollar vacunas efectivas y utilizar tecnologías innovadoras para la caracterización del virus hacia la mejora de la respuesta y la preparación de manera coordinada”, afirmó Cyril Gay, líder senior del programa nacional en USDA, ARS.
MEDIOS PARA PREVENCIÓN Y CONTROL DE LA PPA
Durante la reunión, los participantes discutieron la posibilidad de autorización de vacunas potentes y seguras, la mejora de los diagnósticos de laboratorio y otros aspectos de la prevención y el control de la peste porcina africana. La mesa redonda también exploró la posible designación del USDA como Centro de Referencia de la FAO para la PPA para que proporcione experiencia científica y técnica, servicios de diagnóstico, laboratorio y capacitación de campo para coordinar estudios de investigación y desarrollo y contribuir a los proyectos de la FAO.
"La reunión entre el USDA-APHIS y la FAO refleja nuestro compromiso compartido de abordar los desafíos que plantea la peste porcina africana. Al trabajar juntos, podemos mejorar la vigilancia, el diagnóstico, la prevención y el control, así como los esfuerzos de investigación y desarrollo de capacidades en los países afectados y en aquellos que corren riesgo a nivel mundial, permitiendo la implementación basada en la ciencia de la prevención y el control sostenibles de la peste porcina africana”, comentó Muzafar Makhdoomi, director asociado de diagnóstico de enfermedades de animales extranjeros en USDA, APHIS.
Dentro de la Iniciativa Mundial para el Control de la PPA en curso, desarrollada y lanzada conjuntamente por la FAO y la Organización Mundial de Sanidad Animal (WOAH) en 2020 bajo el paraguas del Marco Mundial para el Control Progresivo de las Enfermedades Transfronterizas de los Animales (GF-TAD), la FAO fomenta la cooperación de múltiples socios y múltiples partes interesadas para abordar el control de la peste porcina africana de una manera holística y técnicamente sólida, basada en innovaciones con transferencia de conocimiento y tecnología a países afectados por la peste porcina africana y con alto riesgo de introducción de esta enfermedad devastadora.