España concluyó el 2022 sin notificar ningún caso de encefalopatía espongiforme bovina

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha publicado los últimos datos sobre la encefalopatía espongiforme bovina (EEB) correspondientes al 2022.

En los años iniciales de aplicación del Programa Nacional (recogido en el RD 3454/2000), se realizaban aproximadamente 500.000 de análisis anuales en bovinos de las distintas subpoblaciones susceptibles recogidas en la legislación. El sistema de seguimiento de España ha ido adaptando las modificaciones legislativas en respuesta a los nuevos conocimientos científicos emanados de la EFSA, que ha permitido incrementar paulatinamente la edad de los bovinos de muestreo obligatorio, lo que explica el ligero pero continuado descenso en el número de pruebas de EEB realizadas, que fue especialmente acusado durante el año 2014, tras la autorización a cesar el muestreo de bovinos sanos sacrificados para el consumo humano.

Desde el año 2001 se han llevado a cabo, aproximadamente, 6 millones y medio de pruebas de EEB. En el año 2022 ha habido un descenso del 5,7 % de bovinos analizados (59.514) respecto al año anterior 2021 (62.565).

El número de animales analizados en el grupo de riesgo (animales con sintomatología ante-mortem, sacrificados de urgencia y muertos o sacrificados para no consumo) contabilizó 59.135 bovinos (un 99,36 % del total) y ha sido similar a 2021 (99,48%).

La subpoblación objeto de vigilancia en la que cada año se realiza el mayor número de test es animales muertos o sacrificados para no consumo humano. El informe detalla que en el año 2022 se alcanzó el 96,72 % del total de pruebas realizadas (57.560 bovinos). Durante el año 2022 no se han analizado bovinos sospechosos, en contraposición con los 4 declarados en 2021.

Por otra parte, y “gracias a la aplicación de las medidas contempladas en los Programas Nacionales de Erradicación”, desde el año 2003 la tendencia ha sido descendente en el número de focos declarados en España llegando a no declarar focos en el año 2013. Los escasos focos desde el año posterior (2014) hasta el 2022 se han diagnosticado en animales de edad avanzada y sólo 1 de ellos (en el año 2014) ha sido de variante clásica, siendo los restantes de variantes atípicas. En España no se notificaron casos de EEB en 2022, revela el texto.

AUMENTO DE LA EDAD MEDIA DE CASOS DETECTADOS

En cuanto al análisis de la edad media de los casos detectados, el documento detalla que ésta ha ido incrementándose desde el inicio de la vigilancia; de los iniciales 6,4 años de media de edad hasta los 16,42 del caso diagnosticado en 2017, con un pico máximo de 18,66 años de media en 2014. “Este aumento de la edad media indica un claro avance en la erradicación de esta enfermedad y la efectividad de las medidas adoptadas, especialmente la prohibición en materia de alimentación animal”. Centrando la atención en los datos desde el año 2016, cuando España fue declarada país con riesgo insignificante, se puede observar que la mayoría de los animales positivos corresponde con animales de avanzada edad.

EDAD MEDIA DE LOS BOVINOS POSITIVOS (2000- 2022).

El documento concluye recopilando los logros conseguidos en la lucha contra la EEB, celebrando que la reducción del número de casos junto al incremento de la edad media de los animales detectados demuestra la efectividad de las medidas de control adoptadas, teniendo además en cuenta que el tamaño poblacional se ha mantenido prácticamente constante.