El Imperial Collegue de Londres ha llevado a cabo un estudio del que se ha hecho eco Diario Veterinario, en el que sus autores afirman que existe una necesidad urgente de revisar las evaluaciones de riesgos y las prácticas de prescripción de los antiparasitarios.
Los parasiticidas son productos ampliamente utilizados y que se aplican en perros y gatos para prevenir o matar pulgas y garrapatas. Para conseguir su efecto, contienen una serie de productos químicos tóxicos. Estos productos han sido prohibidos para su uso agrícola en los cultivos, ya que se ha demostrado que afectan a las abejas y otros insectos polinizadores importantes para los ecosistemas.
Aún así, la investigación expone que dichos compuestos todavía se venden ampliamente como parasiticidas para mascotas y que los ríos y lagos de los ambientes urbanos presentan químicos.
Tras esta publicación, la Asociación Veterinaria Británica (BVA, por sus siglas en inglés) ha respondido que "es importante considerar el impacto que estos productos pueden tener en el medio ambiente", por lo que alienta a sus miembros a usar estos medicamentos de manera responsable, evitando el tratamiento general.
Por su parte, la vicepresidenta senior de la BVA, Justine Shotton, considera que "todavía hay muchas lagunas de conocimiento en torno a los productos antiparasitarios, por lo que esta investigación del Imperial College, aunque es impactante, es bienvenida".
Asimismo, ha añadido que la BVA "está trabajando para crear conciencia sobre el problema dentro del sector veterinario y está desarrollando recursos para ayudar a los veterinarios a tomar decisiones basadas en el riesgo sobre cuándo tratar. Este es un verdadero problema de One Health, con profesionales veterinarios que necesitan equilibrar la salud animal, la salud humana y la salud del ecosistema en general".
"Los dueños de mascotas siempre deben hablar con sus veterinarios, quienes les informarán sobre las diferentes opciones de parasiticidas para encontrar la mejor solución para prevenir y tratar los parásitos según sea necesario para su mascota”, ha concluido Shotton.