Las especies exóticas invasoras (EEI) son especies exóticas capaces de colonizar nuevas áreas y establecer poblaciones viables más allá de su área de distribución natural. Las EEI pueden ser portadoras de patógenos zoonóticos, como la gripe aviar o el virus del Nilo Occidental, afectando no solo a las especies autóctonas, sino también a la salud humana, e imponiendo costes económicos. Por lo tanto, el estudio de las EEI, sus patógenos y sus posibles efectos nocivos en las poblaciones autóctonas tendría importantes implicaciones tanto para la salud humana y animal como para la conservación de la biodiversidad.
La malaria sería otra enfermedad causada por parásitos sanguíneos (hemosporidios) transmitidos por mosquitos. Entre los hemosporidios que infectan aves se encuentran los géneros Plasmodium, Haemoproteus y Leucocytozoon, que incluyen el agente causal de la malaria aviar (Plasmodium spp.). Aunque los linajes que infectan a las aves no pueden transmitirse a humanos, estos son capaces de infectar a un amplio número de especies de aves en todo el mundo causando graves efectos en la supervivencia, la condición corporal y el éxito reproductivo de sus hospedadores. Por ejemplo, la introducción accidental de mosquitos Culex quinquefasciatus y de malaria aviar Plasmodium relictum en las islas Hawái se suele citar como un ejemplo típico del impacto devastador de enfermedades invasoras en las comunidades de aves autóctonas, ya que al no presentar defensas inmunitarias frente a estos parásitos muchas especies de aves llegaron a extinguirse.
Características específicas de los hospedadores, como su morfología, comportamiento o rasgos fisiológicos, podrían determinar la susceptibilidad de los individuos o especies a la infección por malaria y, por tanto, influir en su papel como reservorio potencial y amplificador de la infección. De este modo, el estudio de la prevalencia y diversidad de los parásitos de la malaria aviar en poblaciones de aves exóticas es crucial para la conservación de la biodiversidad.
Dentro del proyecto regional “Factores promotores de invasiones biológicas en aves y reptiles de Extremadura“ (IB16121, liderado por Alfonso Marzal), investigadores de la Universidad de Extremadura (UEx), la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC), y el Grupo de Investigación en Gestión de Recursos Cinegéticos y Fauna Silvestre del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC – CSIC, UCLM, JCCM) han analizado la prevalencia y la diversidad de malaria y otros hemosporidios en tres especies de paseriformes exóticos (pico de coral, bengalí rojo, tejedor amarillo) frecuentes en humedales del suroeste de España.
También han explorado la posible relación entre la condición corporal, el hematocrito y el volumen de la glándula uropigial con la infección por estos parásitos, ya que se esperaría que los individuos infectados mostrasen valores inferiores que los no infectados.
RIESGO DE PROPAGACIÓN A ESPECIES AUTÓCTONAS
Los resultados del estudio muestran una menor prevalencia de infección por hemosporidios en los paseriformes invasores en el área de estudio (2,17% Leucocytozoon, y 1,57% Plasmodium) que las encontradas en estas mismas especies dentro su área de distribución natural (en torno al 30%). Los linajes detectados en este estudio se suelen encontrar con frecuencia en aves autóctonas de la Península Ibérica, sin embargo, no se detectó ningún linaje de los que estas especies suelen presentar en su área de distribución natural.
Esto concuerda con la Hipótesis de la Liberación del Enemigo, que afirma que los colonizadores que se asientan con éxito suelen albergar una comunidad reducida de parásitos de su área originaria en comparación con sus congéneres nativos, ya sea porque estaban ausentes en los colonizadores o porque los parásitos se perdieron durante el tránsito o después de la llegada. “Estos resultados nos alertan sobre un aumento potencial del riesgo de adquirir enfermedades locales ya que los parásitos que infectan a EEI podrían amplificarse y propagarse a las especies autóctonas”, comentan.
Aunque la infección por hemosporidios no tuvo aparentemente ningún efecto sobre las variables fisiológicas consideradas (condición, hematocrito, volumen de glándula uropigial), las diferencias entre especies podrían explicarse por la susceptibilidad diferencial a los parásitos hemosporidios, donde la fenología reproductiva de cada especie podría tener un papel principal.
En su conjunto, los resultados de este trabajo científico podrían ayudar a comprender mejor la capacidad de las especies de aves exóticas para colonizar nuevos territorios más allá de su área de distribución natural, aportando información sobre su papel en la dinámica de transmisión de patógenos locales en las zonas que invaden. Concretamente, los autores reclaman una mayor atención sobre el posible impacto de las EEI en la dinámica de transmisión de patógenos locales en las zonas invadidas, subrayando la importancia de estudios que integren a ecólogos, parasitólogos y el sector sanitario para diseñar políticas coordinadas sobre programas de control y erradicación. Por otro lado, destacan la necesidad de incentivar iniciativas centradas en informar a los ciudadanos sobre el impacto ecológico y las amenazas para la salud de las Especies Exóticas Invasoras con el fin de promover comportamientos responsables.