“Existen bacterias superresistentes que no se combaten con antibióticos y serán una gran epidemia"

Este 18 de noviembre se celebra el ‘Día Europeo para el Uso Prudente de los Antibióticos’, una iniciativa de concienciación sobre los trastornos y afecciones que la resistencia a los antimicrobianos (RAM) supone para la salud pública global. 

La RAM ocurre cuando las bacterias, los virus, los hongos y los parásitos cambian con el tiempo y ya no responden a los medicamentos, lo que dificulta las infecciones para tratar y aumentar el riesgo de propagación de enfermedades. La RAM contribuye a casi 5 millones de muertes al año, la mayoría de las cuales ocurren en países de ingresos bajos y medios. Según estimaciones del Banco Mundial, 24 millones de personas adicionales se verán obligadas a vivir en la pobreza extrema para 2030 si no se toman medidas contra la RAM hoy. En definitiva, la RAM plantea serias amenazas para la salud humana, animal, vegetal y ambiental, la seguridad alimentaria y la preparación y respuesta para la prevención de pandemias. 

El veterinario David Rodríguez Lázaro, director del Área de Microbiología de la Universidad de Burgos, asegura que "si no hacemos nada, habrá más de 10 millones de fallecimientos al año. Es decir, será la primera causa de mortalidad en el mundo muy por encima del cáncer". 

Para conocer más sobre este grave problema, hemos hablado con Sonia Martínez, profesora e investigadora de Microbiología e Inmunología de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de León. La experta destaca que “si hemos llegado a este nivel de resistencia a los antibióticos es por su mal uso. En sanidad pública ha costado mucho entender la necesidad de un antibiograma (técnica in vitro que detecta la sensibilidad o resistencia de una bacteria a una batería de antibióticos) para detectar qué antibiótico es eficaz en cada proceso infectivo", asegura. También hace mención al mal consumo de los antibióticos, “sin completar la pauta de administración, o incluso utilizando el antibiótico como si de un ibuprofeno o paracetamol se tratara”, asegura. Por su parte, en sanidad animal destaca que "se usaban de manera preventiva (incorporándolos a los piensos) para evitar infecciones…. Y, en general, se abusó de uno de los mejores inventos de la sociedad".

“Cuanto mayor uso de antibióticos, más resistencias a los mismos se generan y estas resistencias las bacterias se las pueden pasar de unas a otras por mecanismos de transferencia de material genético, por ello existen bacterias superresistentes que ya no somos capaces de combatir con las moléculas de antibióticos que hay y serán la gran epidemia de los años venideros”, advierte.  

USOS Y ALTERNATIVAS ACTUALES A LOS ANTIBIÓTICOS 

Martínez afirma que, "en muchos casos, los antibióticos son irremplazables". "Si un animal está enfermo debe tratarse con antibióticos, por supuesto, es obligación por parte del veterinario. Este tema de reducción del uso de antibióticos, y por tanto reducción de las resistencias, trata de usar bien los antibióticos, usarlos cuando sean solo necesarios y de mejorar la salud de los animales para que se enfermen menos. Es decir, buen uso y responsable de los antibióticos", aclara.

En referencia a las alternativas existentes, nombra a la fagoterapia (terapia basada en el uso de virus que infectan y por lo tanto destruyen bacterias que están creando una infección en el organismo), "de manera experimental están dando buenos resultados". "Y en sanidad animal hay también trabajos muy esperanzadores sobre suplementos en la alimentación de ácidos orgánicos que mejoran la salud animal y dan robustez al sistema inmune de los mismos”, revela. 

SITUACIÓN SECTOR VETERINARIO EN ESPAÑA

Según datos oficiales, desde que en España se implementó en 2014 el Plan Nacional Frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN), la sanidad animal ha experimentado una reducción de consumo de antibióticos de un 58,8 %, por el 11,8 % en salud humana. Así lo confirma Martínez: “desde 2014 la situación de España ha mejorado tanto que los porcentajes de uso de antibióticos se asemejan a muchos países europeos. En el 2014 España era uno de los países que más antibióticos consumían en Veterinaria y en solo 8 años hemos disminuido tremendamente estas cifras, acompañando a estos datos de una mejor salud y bienestar de nuestros animales".  

“Es importante agradecer a las autoridades competentes los planes y normativas establecidas que hicieron mejorar estos porcentajes, pero también, y, sobre todo, un agradecimiento al sector ganadero que luchó unido frente al mal común no solo siguiendo las recomendaciones, sino mejorando su trabajo y modificando algunas rutinas muy arraigadas con los años", añade. 

Para seguir bajando las cifras de uso de antibióticos en el sector veterinario se deben seguir mejorando las prácticas, "pensemos que si somos capaces de mejorar la salud de nuestros animales, estos se infectarán menos y por lo tanto no necesitarán tanto consumo de antibióticos. Por ello es importante cuidar la bioseguridad interna y externa en nuestras granjas, nunca usar antibiótico como preventivo sino ante un proceso infeccioso bacteriano claro, mejorar el manejo de animales, mejoras en la alimentación que hagan más robusto el sistema inmune de los animales etc…"

Por último, aboga por "mejorar la comunicación entre diferentes sectores. A fin de cuentas,  todos estamos luchando frente a un enemigo común que pone en peligro nuestras vidas". Y reclama que se apueste más por la ciencia, "es una asignatura aún muy pendiente en nuestro país. Debe existir mayor financiación en investigación para poder abordar nuevas situaciones. La ciencia es primordial para buscar alternativas, soluciones. Imprescindible que se le dé dentro de la sociedad el peso que se merece".