La obesidad consiste en el acumulo de tejido graso de forma patológica en el organismo, y es una enfermedad de frecuente presentación en los animales de compañía. La Dra. Ashley Navarrette, profesora de la Facultad de Medicina Veterinaria y Ciencias Biomédicas de Texas, explica desde su experiencia cómo controlar el peso de los gatos.
Para determinar el peso saludable de un gato, la experta explica que los veterinarios realizan una puntuación de la condición corporal (BCS, por sus siglas en inglés), como parte de cualquier examen físico. “Al evaluar la condición corporal de un gato, los veterinarios observan y palpan para determinar la cobertura de grasa en un paciente y asignarles un número en una escala, generalmente del 1 al 9”, comenta.
Por lo tanto, “una condición corporal ideal varía entre un BCS 4-6, siendo ideal una puntuación de 5. Comenzamos a preocuparnos cuando los gatos tienen un BCS 7 o más, que es donde comenzamos a etiquetar a un paciente como con sobrepeso y progresando hacia la obesidad (8 y 9)".
Afortunadamente, “la mayoría de las personas pueden pesar a sus gatos en casa usando el truco de pesarse ellos mismos primero, pesarse a sí mismos y al gato, y luego hacer el cálculo para saber el peso del animal".
Así, recomienda a los propietarios que controlen de forma rutinaria el peso de sus gatos al menos una vez al mes para detectar cualquier tendencia al alza o a la baja con anticipación.
Debido a que los pacientes felinos generalmente solo ven a su veterinario una o dos veces al año, Navarrette considera que "es la responsabilidad del propietario mantener a su mascota en un peso adecuado".
Los propietarios deben comenzar a trabajar con sus veterinarios en un plan de alimentación saludable desde la etapa de gatito cachorro, ya que una dieta felina saludable variará según su edad y estado de salud. “Su veterinario también puede ayudar a determinar los requisitos calóricos adecuados”, explica la experta.
En general, la veterinaria aconseja “una dieta rica en proteínas que esté adecuadamente equilibrada y contenga todos los nutrientes necesarios para un felino adulto aparentemente sano. También recomendamos reducir la ingesta de calorías en un 25-30 % después de la esterilización o castración".
La importancia de las proteínas animales en las dietas de los gatos es conocido ya por diversas empresas que lo están empezando a aplicar en sus productos, como la gama bajo prescripción veterinaria Veterinary HPM de Virbac.
PROBLEMAS DE LA OBESIDAD
La obesidad no suele ser entendida como una patología, y algunos propietarios “pueden creer que un par de kilos de más no es gran problema”.
“Si bien su mascota puede parecer contenta con el sobrepeso, sus sistemas corporales se ven afectados por el exceso de tejido graso”, asegura.
Además, los gatos que tienen sobrepeso y son obesos “tienden a ser menos sociales y menos activos. También tendemos a ver una disminución en el aseo porque simplemente no pueden alcanzar determinadas partes de su cuerpo debido a su tamaño ".
Del mismo modo, tener en cuenta el peso de la mascota también es importante porque la obesidad puede llevar rápidamente a una mala calidad de vida, como la falta de habilidades motoras.
La veterinaria apunta que la obesidad también puede provocar diabetes mellitus tipo II, problemas ortopédicos como la osteoartritis y problemas urinarios, como un mayor riesgo de enfermedad del tracto urinario inferior felino.
Afortunadamente, hay varias cosas que los dueños de mascotas pueden hacer para ayudar a controlar el peso de los gatos, “incluida la programación de las comidas”.
En algunos casos, “el veterinario también puede sugerir la transición de su gato a una dieta para bajar de peso. Estos alimentos son tradicionalmente más ricos en proteínas y fibra que otros alimentos para gatos”. Sin embargo, la transición de un alimento a otro puede ser una tarea más difícil de lo que parece.
“A los gatos les gusta lo que les gusta y odian lo que odian”, señala Navarrette. "A menudo, los gatos se acostumbran a una dieta en particular, y es posible que tengas que probar varias dietas antes de que tu gato acepte una".
El cambio de alimentos también debe hacerse lentamente en el transcurso de siete a diez días para ayudar a prevenir posibles problemas gastrointestinales. Si surge algún problema durante este proceso, la experta aconseja a los propietarios que se pongan en contacto con el veterinario.
MANTENER LA CONDICIÓN CORPORAL
Finalmente, cuando controle el peso del animal, debería de “integrar el ejercicio en su vida diaria a través de árboles para gatos de interior, juguetes interactivos o perchas para gatos puede estimular su metabolismo”.
Al igual que con cualquier programa de pérdida de peso, ya sea felino u de otras mascotas, “es una maratón y no un sprint. La pérdida de peso llevará tiempo; la paciencia y la constancia son claves en este proceso. Es posible que los chequeos tengan que ser frecuentes, como cada seis u ocho semanas, para monitorear el progreso y hacer las modificaciones necesarias".