En uno de los destinos más famosos a nivel mundial para la observación de la fauna estuvo recientemente el docente de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Concepción, el Dr. Sebastián Muñoz Leal, quien junto a otros profesionales del área fueron a las Islas Galápagos, en las costas de Ecuador.
Antes de visitar el archipiélago, los investigadores impartieron un curso teórico/práctico sobre garrapatas en el Instituto de Investigación en Zoonosis ubicado en la Universidad Central en Quito, Ecuador. “Ahondamos en la identificación de las especies de garrapatas de importancia para la salud humana y la salud animal que ocurren en Ecuador. Además, el curso contó con una parte práctica para la detección de bacterias transmitidas por estos parásitos. El curso se extendió por cuatro días con un quorum de 20 personas de diversas partes de Ecuador”.
La iniciativa se concretó gracias a la vinculación entre el Dr. Muñoz y el Dr. José Manuel Venzal (Uruguay) con la entomóloga ecuatoriana Sandra Enríquez. “Ella se está especializando en garrapatas y nos contactó para que desarrolláramos esta instancia. Luego, uno de los objetivos de esta visita fue desarrollar trabajo de campo en Galápagos que es un ’hotspot’ de diversidad. Los animales que se encuentran allí son asombrosos, la mayoría son especies endémicas que han desarrollado morfologías que escapan a lo común”, comentó el experto citando a los pinzones, tortugas gigantes e iguana marina como ejemplos de vertebrados que se encuentra en las Islas Galápagos, lugar reconocido por la Unesco como Patrimonio Natural de la Humanidad.
Cabe mencionar que la fauna de vertebrados que allí habita también está parasitada por garrapatas, que en este caso son únicas. “Nuestra idea era hacer una caracterización genética de las especies que habían sido colectadas a partir de los 70 en al menos tres islas del archipiélago. Sin embargo, no pudimos colectar todas las que teníamos en mente porque es muy difícil llegar a los puntos donde éstas fueron colectadas hace unas cinco décadas”.
Según lo manifestado por el Dr. Sebastián Muñoz, la expedición logró colectar dos especies de garrapatas en un total de 80 iguanas marinas examinadas en tres diferentes islas: la isla San Cristóbal, Isla Santa Cruz y en la Isla Isabela. “Revisamos además 42 tortugas gigantes, pero los animales no tenían ectoparásitos. Creemos que sólo examinamos aquellas poblaciones de tortugas que fueron criadas en cautiverio y reintroducidas al ecosistema. Esto también es interesante de estudiar, ya que no hay que olvidar que los parásitos forman parte de la diversidad animal y cumplen un rol de moduladores de las poblaciones de sus hospedadores, estimulando el sistema inmune o seleccionando a los individuos aptos para sobrevivir. Al menos en las poblaciones de tortugas reintroducidas que pudimos examinar, creemos que sus ectoparásitos estarían extintos”.
Con las especies de garrapatas recolectadas se realizará un estudio genético principalmente. “La idea es secuenciar los genomas mitocondriales y obtener secuencias de genes nucleares para identificar a estas especies de garrapatas. Luego, por medio de análisis filogenéticos podremos determinar su historia evolutiva. Además, con el ácido nucléico extraído de cada espécimen, podremos hacer una búsqueda de ADN de bacterias de los géneros Anaplasma, Borrelia, Ehrlichia y Rickettsia, que son de nuestro interés, pues algunas especies son reconocidos agentes de enfermedad en animales y humanos. La idea es que la información que obtengamos sea parte de un capítulo de la tesis de doctorado de la investigadora Sandra Enríquez, quien pretende realizar su doctorado en Uruguay, pero guiado también por mí y por lo mismo hará próximamente una pasantía en nuestra Facultad”, explicó el Dr. Muñoz.