Un anillo vascular es un problema cardíaco congénito. En esta afección, parte de la arteria aorta, o sus ramas, forman un anillo alrededor de la tráquea, el esófago o ambos.
Un grupo de veterinarios del Reino Unido ha publicado un trabajo que busca describir el arco aórtico circunflejo izquierdo como una nueva forma de anomalía congénita del anillo vascular canino que conduce a constricción esofágica.
La publicación recogió el caso de 3 perros de razas grandes de edad variable: un perro pastor alemán macho entero cruzado con rottweiler de 9 meses, un perro pastor alemán macho entero de 17 semanas y una labrador retriever hembra castrada de 9 años, vistos entre abril de 2022 y mayo de 2023.
Los perros se presentaron por regurgitación posprandial crónica y crecimiento deficiente. Un perro se presentó por una masa dura en la región mandibular caudal.
La tomografía computarizada reveló una mitad craneal orientada hacia la izquierda normal y una mitad caudal anormal del arco aórtico que cruzaba hacia el hemitórax dorsal derecho, lo que provocaba una constricción esofágica en todos los perros. Además, un perro presentó un conducto arterioso persistente derecho y otro una arteria subclavia derecha aberrante.
Los autores han comentado que el arco aórtico circunflejo izquierdo es un tipo de anomalía congénita del anillo vascular en perros, poco frecuente y recientemente descubierta, que presenta una alteración anatómica similar a la forma humana. Los signos clínicos incluyen regurgitación posprandial y crecimiento deficiente. “La anomalía vascular del arco aórtico circunflejo izquierdo no se puede corregir quirúrgicamente mediante la toracotomía izquierda que se utiliza habitualmente para las anomalías más comunes del anillo vascular en perros”, añaden.
Asimismo, apuntan que la tomografía computarizada es una modalidad diagnóstica útil para el diagnóstico de esta afección, la detección de malformaciones vasculares congénitas concomitantes, la evaluación de patologías asociadas y la planificación quirúrgica.