La Asociación Estadounidense de Practicantes Felinos (AAFP) y la Asociación Internacional de Hospicio y Cuidados Paliativos para Animales (IAAHPC) han publicado recientemente las directrices de cuidados paliativos y hospicio para felinos AAFP/IAAHPC 2023.
Estas pautas destacan la importancia de la atención reconfortante para el paciente y el bienestar emocional del cliente, reconociendo las conexiones entre las necesidades físicas, psicológicas y sociales del paciente. “Asimismo, también analizan enfermedades específicas, las mejores prácticas para el manejo del dolor felino y las interacciones amigables con los gatos”, recogen desde la American Veterinary Medical Association (AVMA).
"Estas pautas proporcionan un resumen completo sobre cómo abordar y satisfacer las necesidades, tanto del gato como del cuidador", explica la Dra. Katrina Breitreiter, propietaria del South Austin Cat Hospital, en Texas. "Este es un recurso valioso para cualquier profesional veterinario que trate gatos en su consulta", añade.
El documento introduce la idea de “unidad de atención”, que proviene de la medicina humana y fomenta la colaboración entre los miembros del equipo interdisciplinario para apoyar mejor al cuidador y sus necesidades.
“En lugar de que el paciente felino sea el único foco de atención, la unidad de atención incluye a los cuidadores y sus necesidades. La utilización de este enfoque une a los profesionales veterinarios con trabajadores sociales, organizaciones benéficas y profesionales de la salud mental para facilitar la comunicación abierta sobre las preferencias de tratamiento y los objetivos de la atención. Ese es uno de los fundamentos de la atención al final de la vida contemporánea”, recalca.
Además, las pautas aclaran que “la atención al final de la vida requiere un enfoque interdisciplinar, ya que los equipos veterinarios por sí solos no están capacitados para brindar atención y atender las necesidades psicológicas, sociales y espirituales de las personas”.
Otros temas incluidos en el documento son los siguientes: un plan de cuidados de cinco pasos que permite adaptar el enfoque tanto al gato como a la familia involucrada en el cuidado; un debate sobre la comunicación y las preferencias del cuidador, sobre la atención centrada en las relaciones y sobre cómo guiar al cuidador durante la consulta; una guía para establecer un “presupuesto de atención”, que influya en lo que se puede hacer por cada gato de forma razonable, práctica y ética; una evaluación de la salud mental del gato, además de la satisfacción de las necesidades esenciales individuales del gato y modificación ambiental; una guía sobre el manejo de la nutrición e hidratación; y, finalmente, la última información disponible sobre cómo evaluar la calidad de vida de un gato.
En este sentido, AVMA señala que los profesionales veterinarios pueden utilizar algunos de estos recursos para ayudar a los cuidadores a comprender y reconocer el dolor felino, cuyo control es importante para mantener una buena calidad de vida. Estos materiales complementarios incluyen, además, un folleto educativo para cuidadores de gatos, un vídeo sobre cómo enseñar a los gatos a acostumbrarse a tomar medicamentos y un cuestionario para pacientes para que los profesionales veterinarios lo utilicen durante una consulta.
Asimismo, el desarrollo de las directrices ha contado con el apoyo de una subvención educativa de Royal Canin para la AAFP. Además, los autores de las directrices explican que “las obligaciones bioéticas del equipo veterinario hacia el gato, el cuidador del gato y la unidad de cuidados más amplia, proporcionan una lente a través de la cual considerar todos los diversos aspectos del hospicio y los cuidados paliativos, así como un marco formal dentro del cual facilitar la toma de decisiones compartida que los gatos, sus cuidadores y sus unidades de cuidado necesitan y merecen”.