Expertos internacionales establecen un ranking de posibles patógenos pandémicos

En 2016, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó el Plan de acción inicial de investigación y desarrollo (I+D) para prevenir epidemias, que se creó en consulta con expertos de diversos campos. El Plan de I+D de la OMS identificó varias infecciones como altas prioridades para la prevención, incluida la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, la enfermedad por el virus del Ébola, la enfermedad por el virus de Marburg, la fiebre de Lassa, el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS), el síndrome respiratorio agudo severo (SARS), Nipah y enfermedades henipavirales, fiebre del Valle del Rift, enfermedad por el virus del Zika y la enfermedad X (patógeno hipotético y desconocido que podría causar una epidemia futura).

Después de la declaración de pandemia de enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19) en marzo de 2020, la lista se actualizó para incluir COVID-19. La selección de enfermedades para el plan tuvo en cuenta factores como la transmisibilidad de persona a persona, la gravedad o la tasa de letalidad, el nivel de interacción entre humanos y animales, el contexto de salud pública de las áreas afectadas, los posibles impactos sociales y el proceso evolutivo potencial de los patógenos.

En respuesta a la pandemia de COVID-19, en 2021 se creó en Europa la plataforma VACCELERATE, que conecta a todas las partes interesadas europeas en materia de desarrollo de vacunas. La iniciativa VACCELERATE resultó en el establecimiento de una red de sitios que comprende aproximadamente 500 centros de ensayos clínicos en Europa, cada uno de ellos equipado con experiencia en enfermedades infecciosas. 

Prepararse para la próxima pandemia requiere clasificar los patógenos con potencial pandémico y priorizar los próximos pasos estratégicos de la red VACCELERATE. Por ello, el propósito de un trabajo reciente fue clasificar las enfermedades enumeradas en el Plan de acción de I+D de la OMS para prevenir epidemias en función del riesgo percibido de potencial pandémico, con aportes de expertos en enfermedades infecciosas de la plataforma VACCELERATE.

UN RANKING DE HASTA 15 PATÓGENOS

De febrero a junio de 2023, los datos se recopilaron mediante un formulario electrónico de informe de casos en línea. También se contactó con otros expertos relevantes en enfermedades infecciosas de fuera de Europa para obtener comentarios a escala global.

Cada participante podría clasificar los patógenos responsables de las enfermedades enumeradas en el Plan de acción de I+D de la OMS para prevenir epidemias, incluido el virus de la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, la enfermedad X, el virus del Ébola, el virus de Lassa, el virus de Marburg, el MERS, el virus Nipah, el virus de la fiebre del Valle del Rift, el SARS que causa el coronavirus tipo 1 (SARS-CoV), el SARS que causa el coronavirus tipo 2 (SARS-CoV-2) y el virus Zika. Los expertos en enfermedades infecciosas también tuvieron la opción de incluir en sus clasificaciones tres patógenos adicionales, como el hantavirus, henipavirus y virus de la influenza, y tuvieron la oportunidad de agregar patógenos de su propia consideración en las clasificaciones. Cada ranking podría contener tantos patógenos como se consideren, desde un mínimo de uno hasta 15 patógenos.

En la fase de análisis, según la clasificación de los expertos en enfermedades infecciosas, se asignaron puntos de 15 a 1 en orden inverso. El patógeno con mayor probabilidad percibida de desencadenar una pandemia fue valorado (1.ª posición) con 15 puntos, mientras que el patógeno considerado con menor probabilidad de desencadenar una pandemia (15.ª posición) recibió un solo punto.

PRINCIPALES PATÓGENOS

Se obtuvo un total de 187 respuestas de personas que representaban a 57 países diferentes. Entre los países que proporcionaron el mayor número de respuestas, Alemania ofreció 27 respuestas (14,4 %), seguida de España con 20 respuestas (10,7 %) e Italia con 14 respuestas (7,5 %).

En cuanto a los patógenos con mayor probabilidad percibida de desencadenar una pandemia, los virus de la gripe ocuparon las posiciones más altas en las clasificaciones. De los 187 participantes, 147 expertos en enfermedades infecciosas (78,6 %) incluyeron los virus de la gripe en sus primeros puestos, oscilando entre la primera y la cuarta posición. La enfermedad X fue seleccionada 92 veces (49,2 %), del 1.º al 9.º lugar, mientras que el SARS-CoV-2 se incluyó en 81 clasificaciones (43,3 %), del 1.º al 14.º lugar. El SARS-CoV ocupó 41 puestos (21,9 %), ocupando posiciones del 1 al 13, y el virus del Ébola 36 veces (19,3 %) ocupando el puesto 1 al 9. Estos hallazgos los posicionan como los cinco principales patógenos en general según las respuestas de la encuesta. Las clasificaciones de los cinco patógenos principales no mostraron variaciones significativas entre diferentes países ni continentes.

LOS VIRUS DE LA GRIPE, LOS QUE MÁS PREOCUPAN

En la encuesta recogen que “los virus de la gripe recibieron las clasificaciones más altas entre los patógenos, y el 79 % de los participantes les incluyeron en sus primeros puestos”. La enfermedad X, el SARS-CoV-2, el SARS-CoV y el virus del Ébola también ocuparon un lugar destacado. Asimismo, otros tres patógenos, el virus de Marburgo, el henipavirus y el virus de la fiebre del Valle del Rift, “ocuparon sistemáticamente puestos inferiores y no alcanzaron las primeras posiciones”.

En cuanto a la enfermedad X, los autores matizan que “representa la conciencia de que una epidemia internacional grave podría ser causada por un patógeno que actualmente se desconoce como causante de enfermedades humanas, sin estar asociado con un patógeno específico”. Por lo tanto, “es un desafío prevenir algo de naturaleza desconocida, pero también brinda un amplio margen para clasificaciones como la nuestra”.

En conclusión, los expertos en enfermedades infecciosas consultados han identificado la influenza, el SARS-CoV, el SARS-CoV-2 y el virus del Ébola como los patógenos con mayor potencial y preocupación para dar origen a nuevas pandemias. Estos patógenos poseen “una fácil transmisibilidad, principalmente a través de gotitas respiratorias en el aire, y ya han demostrado capacidades epidémicas o pandémicas”.

No obstante, añaden que “nuestros resultados adolecen de una falta de participación de expertos en enfermedades infecciosas en África y Asia, a pesar de que la mayoría de los brotes relacionados con los patógenos analizados han ocurrido en estos continentes”. Por lo que las futuras iniciativas de clasificación “deberían priorizar la incorporación de perspectivas de África y Asia”.