El número de perros en Europa comienza a dar signos de estabilidad tras dispararse durante la pandemia. Según la Real Sociedad Canina de España (RSCE), atendiendo a fuentes de la Comisión Europea, al cierre de 2022 había censados en la UE alrededor de 73 millones de perros. Es el triple que en 2014, cuando las estadísticas de la Fédération Cynologique Internationale (FCI), la organización internacional más importante del mundo del perro, arrojaban un número aproximado de 24,5 millones.
Se trata de un crecimiento en ocho años de casi el 200 %, que asienta una tendencia creciente entre la sociedad: cada vez hay más hogares con un perro como animal de compañía. La FCI recoge estadísticas de 52 países: 43 íntegramente en Europa, 7 transnacionales (Rusia, Armenia, Turquía, Azerbaiyán, Chipre, Georgia y Kazajistán) y dos fuera de territorio europeo (Israel y Uzbekistán).
Estas cifras incluyen a ejemplares tanto de raza como mestizos. El mayor crecimiento de los últimos años se dio en plena pandemia, de 2020 a 2021; en ese intervalo, los europeos pasaron de tener 60,7 millones a 67,4 millones, un 11 % más. Después escaló el año pasado hasta los 73 millones, un 9 %. El mayor salto en Europa se dio de 2015 a 2016: en ese periodo, se pasó de 38 a 51 millones de perros en los hogares.
BOOM DURANTE LA PANDEMIA
Las restricciones aplicadas por los distintos países durante la pandemia, el encierro, la sensación de soledad, los permisos para salir a pasear con los perros durante el auge de la Covid-19 y la proliferación de redes sociales, influencers y youtubers -que muchas veces aparecen con animales- están detrás de este boom en cuanto al interés de la ciudadanía por tener un perro de compañía. Sin embargo, la acelerada digitalización de las vidas permite a una serie de modas abrirse paso con riesgos evidentes para la salud de los perros.
“Esto conduce a veces a la búsqueda de colores exóticos o tamaños fuera del estándar en los perros de manera banal, a la cosificación del animal con el objetivo de posar con él en una foto u otras modas pasajeras. Y puede acarrear la proliferación de enfermedades de la piel, ceguera, sordera o fotosensibilidad provocados por la venta ilegal de perros de raza”, denucia la RSCE.
CONCIENCIACIÓN Y CUIDADOS
Igualmente, la querencia de los europeos por tener un nuevo miembro más en la familia debe venir acompañada de una concienciación y un elevado grado de responsabilidad acerca de los cuidados y la salud. La lacra del abandono sigue golpeando fuerte.
En vísperas de Navidad, la Organización Colegial Veterinaria (OCV) recuerda que “el abandono de animales domésticos sigue siendo, un año más, uno de los principales problemas de bienestar y calidad de vida de los animales en España”, y reitera la importancia de conocer la responsabilidad de atenciones y cuidados que supone su tenencia para evitar este tipo de situaciones.
Solo en 2022, según datos de la Fundación Affinity recogidos por la OCV, se abandonaron más de 288.000 perros y gatos en España, lo que supone un 3 % de los animales que viven en los hogares españoles, aunque se estima que son muchos más, ya que el 30 % de los perros y el 90 % de los gatos carecen de microchip identificativo.
Según José Miguel Doval, presidente de la RSCE, “para el bienestar de los perros es prioritario que los propietarios reciban asesoría e información sobre las características y el temperamento del animal que va a recalar en la familia, con independencia de si es de raza o mestizo”.