Desde el 1 de enero y hasta el 13 de noviembre de 2023, se han notificado 149 casos de Salmonella Strathcona en Austria (17), Finlandia (2), Chequia (13), Dinamarca (4), Francia (9), Alemania (47), Italia. (34), Luxemburgo (1), Noruega (1), Reino Unido (13) y Estados Unidos (8). La mayoría de los casos se han notificado entre agosto y octubre de 2023.
Según la información disponible ofrecida por la UE, se ven afectados diferentes grupos de edad sin diferencias significativas entre géneros (68 mujeres y 54 hombres). La información sobre el historial de viajes estaba disponible para 19 casos en la UE/EEE y el Reino Unido. Los casos informaron viajes recientes a diferentes países, incluidos Croacia (n=7), Italia (n=5), Montenegro (n=5), Egipto (n=1) y Europa (sin más especificación; n=1). Además, seis casos entrevistados en Estados Unidos informaron haber viajado a Europa (España, Italia, Croacia, Francia y Eslovenia). De los casos estadounidenses, 4/6 casos informaron viajes a Italia.
Dinamarca investigó un brote histórico de S. Strathcona en varios países en 2011, donde se sospechaba que los tomates ‘datterino’ eran vehículos de infección. Desde entonces, se han registrado brotes en Dinamarca y Alemania en 2019 y 2020. Según la información disponible tras las entrevistas de 52 casos en 2023, 32 (61,5 %) casos declararon haber consumido tomates frescos (de cualquier tipo) antes de la aparición de la enfermedad. Además, de 52 casos, 25 reportaron consumo de huevos (48 %) y 24 casos (46 %) reportaron consumo de queso.
S. Strathcona es un serotipo poco común en la UE y el EEE. En 2022, se notificaron 89 casos en la UE/EEE. Se observó un marcado aumento entre 2018 y 2019, cuando se notificaron 28 y 98 casos respectivamente. Desde 2019, la tendencia se ha mantenido estable.
Según la evaluación de riesgo realizada por las autoridades, la evidencia microbiológica indica una fuente común. Los datos epidemiológicos y microbiológicos indican que la hipótesis más plausible de vehículo de infección podrían ser los tomates, pero esta hipótesis necesita más investigación.
El riesgo de nuevas infecciones persiste mientras continúen las entregas estacionales de productos contaminados. Es probable que se produzcan nuevos brotes en temporadas futuras hasta que se haya identificado y rastreado el vehículo contaminado y se hayan implementado medidas de control.