El tradicional evento anual que celebra el Colegio de Veterinarios de Toledo para conmemorar el día de su patrón, San Francisco de Asís, se convirtió anoche en un homenaje póstumo a la persona que dirigió el colegio durante las dos últimas décadas, Luis Alberto García Alía, fallecido el pasado mes de febrero.
Al acto asistieron más de 300 personas, entre ellos los presidentes de todos los colegios veterinarios de Castilla-La Mancha y diversas personalidades como Joaquín Cuadrado, director general de Ordenación Agropecuaria de la consejería de Agricultura de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha; José Julián Gregorio, alcalde de Talavera de la Reina; Carmen Riolobos, senadora por la provincia de Toledo; y Jaime David Corregidor Muñoz, delegado provincial de Sanidad. Todos ellos quisieron sumarse al homenaje a García Alía, además de acompañar a los profesionales veterinarios de la provincia en su día más señalado.
Tras la misa en honor a San Francisco de Asís y al conjunto de la familia veterinaria, se celebró el homenaje a Luis Alberto García Alía, en el que se proyectó un vídeo sobre su figura y su viuda e hijos recogieron el título póstumo de presidente de honor, así como una escultura conmemorativa.
Juan Julián García Gómez, actual presidente del Colegio de Veterinarios de Toledo, recordó su trayectoria y destacó su gran calidad humana y profesional: “durante dos décadas fue una persona entregada con gran pasión a la defensa de los intereses de nuestra profesión, por lo que es justo reconocerle como presidente de honor del Colegio”.
En términos similares se expresaron Luis Alberto Calvo, presidente de la Organización Colegial Veterinaria; José Ramón Caballero de la Calle, presidente del Consejo de Colegios Profesionales de Veterinarios de Castilla-La Mancha; y Juan José Badiola, también presidente de honor del Colegio de Veterinarios de Toledo.
Por otra parte, en la tradicional cena de hermandad del Colegio de Veterinarios de Toledo se realizó la imposición de insignias a los nuevos colegiados y el reconocimiento al mejor expediente académico del año.
Además, como ya es tradición en la celebración de esta festividad, se rindió homenaje a los veterinarios jubilados en los últimos doce meses con la entrega de un diploma, una insignia y un reloj conmemorativo. Finalmente, se otorgaron los trofeos deportivos de las diferentes competiciones celebradas este año.