La experimentación con animales se ha reducido en la Universidad de Santiago de Compostela (USC) un 20 % respecto a 2019, el año anterior al inicio de la pandemia. Esta es una de las principales conclusiones del 'Informe sobre el uso de animales en experimentación en la Universidad de Santiago de Compostela en 2022' que la USC ha dado a conocer coincidiendo con el día dedicado a la campaña internacional de proactividad investigación comunicación con animales JUNTA 'Be Open about Animal Research Day', coordinado por la European Animal Research Association. Aunque la normativa vigente no obliga a las instituciones que utilizan animales en experimentación a hacer públicas las estadísticas de uso, la USC se suma a las jornadas mediante un ejercicio de transparencia con la presentación anual de este documento.
En la institución compostelana se utilizaron un total de 18.393 animales de experimentación a lo largo de 2022, una cifra ligeramente inferior a la del año anterior. Además, el promedio de animales utilizados en cada proyecto se redujo en un 10 %. En total, tal y como recoge el informe, durante el año 2022 se han realizado experimentos con animales en cuatro centros de la USC. Se trata del Animalarium de investigación y el Acuario de la RIAIDT, ambos pertenecientes al Campus de Lugo, y el Acuario de la Facultad de Biología, junto con el Centro de Biomedicina Experimental (CEBEGA), ubicado en Compostela. En este sentido, cabe señalar que se ha reducido el número de animales a pesar de que el número de proyectos autorizados ha pasado de 51 a 56.
ESTUDIO DEL SISTEMA ENDOCRINO Y EL METABOLISMO
Los procedimientos que se llevan a cabo se pueden clasificar en tres tipos principales de finalidad: investigación básica, que es el uso mayoritario con un 70 %; investigación aplicada y traslacional (casi el 30 %); y, en muy pequeña medida, el uso para la formación (sólo el 0,1 %). Estas proporciones se mantienen prácticamente iguales a las de años anteriores. En la investigación básica, el estudio del sistema endocrino y el metabolismo es el uso mayoritario, superando el 55 % de los animales utilizados para este fin. Entre los objetos de investigación traslacional y aplicada, el estudio de las enfermedades animales constituye el objetivo fundamental.
El ratón es la especie más utilizada en experimentación en la USC (más del 70 %), seguido del grupo 'otros peces' (19,1 %, que incluye pescados de consumo, como lenguado o rodaballo), la rata (5,0 %) y pez cebra (1,3 %). No se han utilizado otros tipos de animales en experimentación ni durante 2022 ni desde 2014. “En general, los datos indican una estabilización en el número de animales utilizados para experimentación y apuntan a la evolución hacia procedimientos menos severos en todos los grupos de especies”, explican los autores del informe, Beatriz Magariños Ferro, José María Méndez Figueiras, Azucena Mora Gutiérrez, Sonia Vázquez Rodríguez y Anxo Vidal Figueroa.
MARCO LEGAL
La experimentación con animales es una actividad estrictamente regulada en el marco normativo español. La legislación española vigente, el 'Real Decreto 53/2013, de 1 de febrero, por el que se establecen las normas básicas aplicables a la protección de los animales utilizados en experimentación y otros fines científicos, incluida la docencia', por el que se transpone la Directiva Europea 2010/63/UE, tiene como objetivo final la sustitución total de animales utilizados en procedimientos científicos. Esta legislación también consagra el llamado principio 3R como principio general de funcionamiento, utilizando alternativas a la experimentación siempre que sea posible. El principio de las 3R busca Reemplazar, Reducir y Refinar el uso de animales en la experimentación.