La diabetes mellitus (DM) es un trastorno endocrino que causa una elevación de glucosa en sangre. Presenta una prevalencia anual estimada en la población de perros del Reino Unido de 0,26 % a 0,32 %. Los signos clínicos incluyen poliuria, polidipsia, polifagia y pérdida de peso.
No obstante, en las últimas décadas ha habido un aumento en la incidencia tanto de DM en humanos como en perros. Este incremento puede deberse a diversos factores ambientales.
Por ejemplo, los asociados con la aparición de DM en humanos incluyen una avanzada edad de la madre en el momento del parto, parto por cesárea, virus, factores dietéticos, contaminación del aire y alteraciones en la flora microbiana intestinal.
Los factores de riesgo supuestamente asociados con el desarrollo de DM en perros incluyen la edad, el sexo y la raza y los factores ambientales, como la esterilización, la obesidad, las infecciones, los medicamentos y las enfermedades concurrentes.
Asimismo, es posible que la exposición a medicamentos pueda afectar el desarrollo de DM en perros, ya sea a corto plazo, como en el caso de los glucocorticoides, o a más largo plazo, como puede ser el impacto de los antibióticos en el microbioma.
Hasta la fecha, se han realizado estudios limitados que exploran las asociaciones entre los medicamentos recetados y la diabetes mellitus en perros. Sin embargo, dado que tanto los glucocorticoides como los antibióticos son medicamentos de prescripción habitual en la práctica veterinaria de primera opinión, un conocimiento más profundo de los efectos de estos fármacos en el desarrollo de la DM podría mejorar el conocimiento de la patogenia de la enfermedad.
Por lo tanto, un estudio realizado en el Reino Unido tuvo como objetivo explorar las asociaciones entre la prescripción de glucocorticoides y antibióticos con las probabilidades de desarrollar DM en perros.
Los objetivos secundarios fueron describir los patrones y tipos de prescripciones de glucocorticoides y antibióticos dentro de la población de estudio.
PREDNISOLONA, Y AMOXICILINA-CLAVULÁNICO
Se utilizó un diseño de estudio de casos y controles para explorar las asociaciones entre la exposición previa a glucocorticoides y antibióticos y el diagnóstico de DM. Se incluyeron un total de 565 casos y 2179 controles.
La exposición a glucocorticoides dentro de las 6 semanas anteriores a la fecha índice se documentó en el 9,0 % de los casos y en el 2,7 % de los controles. La prednisolona fue el glucocorticoide prescrito con más frecuencia. Los trastornos de la piel o los oídos fueron la indicación más común para prescribir glucocorticoides en general.
Los perros a los que se les recetó al menos un tratamiento antibiótico representaron el 39,3 % de todos los casos y el 41,4 % de los controles. La amoxicilina- clavulánico fue el antibiótico más prescrito en general.
INFLUJO DE LOS CORTICOIDES EN EL DESARROLLO DE LA ENFERMEDAD
Tras estudiar los parámetros evaluados, los autores comprobaron que “los perros tratados al menos una vez con glucocorticoides sistémicos en las 6 semanas anteriores tenían cuatro veces más probabilidades de desarrollar DM en comparación con los perros de control no diabéticos”.
Ante estos hallazgos, comentan que “se ha documentado una asociación entre la terapia con glucocorticoides y la DM en gatos. Sin embargo, el vínculo entre la terapia con glucocorticoides, el metabolismo de la glucosa y la diabetes mellitus en perros es más controvertido”.
En cuanto al uso de antibióticos, descubrieron que “los perros que recibieron un ciclo único de tratamiento tenían solo 0,65 veces más probabilidades de DM en comparación con los perros que no recibieron ciclos documentados”.
Según explican, “no se entiende completamente cómo las interacciones y alteraciones en la composición de la microbiota pueden contribuir al desarrollo de la DM, pero la modulación de este proceso por parte de los antibióticos puede tener efectos tanto positivos como negativos”.
Asimismo, analizando otros factores relacionados con el diagnóstico de diabetes, descubrieron que los perros mayores se asociaron con un mayor riesgo de sufrir la enfermedad, y que las hembras enteras tenían más de cinco veces más probabilidades de padecer el trastorno en comparación con los machos enteros. “Esto puede sugerir que las hembras enteras están en riesgo, o que los machos enteros están protegidos”, comentan.
En resumen, el estudio refleja que “el riesgo de desarrollar DM es sustancialmente mayor después de la exposición a glucocorticoides, lo que sugiere que se necesita precaución al prescribir estos fármacos”.
Así, concluyen que “se requiere más trabajo para explorar la asociación entre la terapia con antibióticos y la diabetes mellitus, teniendo en cuenta el momento de la exposición y el impacto que esto puede tener en el microbioma en desarrollo”.