Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos se muestra preocupada por el avance de la peste porcina africana (PPA) en Europa. Según explican, a pesar de que en España aún no se ha detectado ningún foco de la enfermedad, "la evolución en países vecinos, como por ejemplo la nueva aparición de la enfermedad en Grecia, indica que la situación sigue siendo preocupante".
Según datos del informe del MAPA sobre la situación de PPA (con datos de 7 de noviembre 2022) los países con el mayor número de focos declarados son Polonia con 1.543 focos en jabalí y Rumanía con 284 en cerdo doméstico declarados, pero los focos detectados en la frontera alemana con Francia y los casos de Italia de principios de 2022 hacen que el sector se encuentre en tensión.
Unión de Uniones pide mayores controles en aeropuertos, puertos y carreteras para evitar saltos de la enfermedad, así como de los propios jabalíes, en muchos casos, transmisores de la enfermedad.
De cara a reducir el riesgo de entrada de esta enfermedad, pero también de muchas otras, propone que el Ministerio coordine una política para reequilibrar el número de granjas de cebo con el de madres, "con lo que se vería reducido la importación de animales vivos, con los perjuicios sanitarios y de bienestar que ello conlleva", señalan.
LOS COSTES DE PRODUCCIÓN SE HAN DISPARADO
Asimismo, tras hacer un balance del 2022 en el sector porcino, incide en que los costes de producción se han disparado en el último año y pide más apoyo por parte de la Administración para poder aplicar a ayudas que atenúen ese aumento.
Unión de Uniones denuncia que, si bien los precios en lonja subieron el pasado año un 17 %, el capítulo de la alimentación de los animales lo hacía en un 37 %, "lo que supone una evidencia de que los productores no sacan rentabilidad por su carne", afirman.
La organización destaca que la alimentación representa un 70 % del total de costes de producción de una granja tipo, y esta es asumida por las granjas no integradas. En el caso de granjas integradas, recalcan que también han vistos multiplicados sus costes de producción, principalmente en materia de energía (electricidad, calefacción en granjas con lechones…).
En este sentido, reclaman que a nivel estatal se ha dejado al sector fuera de las ayudas destinadas a paliar las consecuencias económicas de la guerra de Ucrania e insta a la Administración a brindar más apoyo.
“Podemos estar un poco, como se suele decir, a verlas venir, pero no eternamente, como parece que nos quieren dejar”, se lamentan desde la organización. “La alimentación de nuestros animales representa una parte importante de nuestra actividad, pero también está el tema de la energía. Todo va sumando”, añaden.
España es el primer país de la Unión Europea en sacrificios y producción de carne con 58,3 millones de cerdos sacrificados y 5,2 millones de toneladas de carne producidas y representa el 22,1 % de la producción comunitaria por delante de Alemania que mantiene el segundo puesto con un 21,2 % de la producción de la UE.
A nivel mundial, estas cifras sitúan a España en tercera posición, sólo por detrás de China y Estados Unidos.
La organización critica que un sector tan importante para la economía a nivel estatal, también gracias a la exportación, no cuente con más apoyos para lograr una mejora de rentabilidad y cifra en más de 6€ por cerdo las pérdidas que acumula el sector en 2022.