La peritonitis infecciosa felina (PIF) es una enfermedad compleja e históricamente fatal causada por una mutación del ubicuo coronavirus entérico felino. Los avances recientes en la medicina felina y antiviral han descubierto posibles tratamientos para la PIF. Un metabolito activo del remdesivir (GS-5734), demostró una elevada capacidad para tratar y controlar la enfermedad en gatos infectados, tal y como adelantó en su día este medio.
Por otra parte, con el reciente brote del SARS-CoV-2, virus de la misma familia que el causante de la PIF, se han lanzado al mercado numerosos antivirales novedosos. El molnupiravir está actualmente disponible para tratar la COVID-19 en adultos. Algunos estudios informaron una disminución drástica en las tasas de hospitalización y muerte de pacientes con COVID-19 con enfermedad leve a moderada tratados con el medicamento.
Debido al gran potencial de molnupiravir para tratar otras infecciones por coronavirus, los dueños de gatos han estado usando molnupiravir como terapia para tratar el PIF. Sin embargo, el uso de molnupiravir para el tratamiento de PIF no está documentado actualmente en la literatura científica.
Ahora, un equipo de investigadores ha llevado a cabo un estudio con el propósito de documentar ese uso y proporcionar una prueba de para validar el molnupiravir como potencial terapéutico para PIF, según los datos informados por los respectivos propietarios que utilizaron el fármaco.
Los 26 gatos tratados con molnupiravir sin licencia fueron tratados con una dosis inicial media de 12,8 mg/kg y una dosis final media de 14,7 mg/kg dos veces al día durante unas 12 semanas.
En total, 24 de 26 gatos todavía vivían libres de enfermedades en el momento en el que el artículo fue publicado, a fecha 20 de octubre del 2022. Un gato fue sacrificado después de completar el tratamiento debido a una convulsión prolongada, y el otro gato se sometió a un nuevo tratamiento por signos clínicos recidivantes. Se informaron pocos efectos adversos, con los más notables, orejas dobladas, bigotes rotos y leucopenia severa, observados en dosis superiores a 23 mg/kg dos veces al día. Este estudio proporciona una prueba para el uso de molnupiravir en gatos y respalda la necesidad de futuros estudios para evaluar más a fondo el molnupiravir como una terapia potencialmente segura y eficaz para la PIF.
“El molnupiravir sin licencia parece ser un tratamiento eficaz para la PIF sospechada como terapia de primera línea y como terapia de rescate, según los datos informados por los propietarios”, indican los investigadores.
“Hay efectos secundarios mínimos informados a la dosis de 12 a 15 mg/kg cada doce horas, y brinda la posibilidad de supervivencia con la remisión clínica de los signos de PIF”, celebran los autores.
Asimismo, comentan que, aunque potencialmente ilegales, “las experiencias de estos propietarios en el tratamiento, y aparentemente curando gatos con PIF, son innegablemente notables, y hay mucho que podemos aprender de los experimentos realizados por estos científicos ciudadanos".