La rabia mata al menos a 60.000 personas al año. La mayoría de estas muertes ocurren en África y Asia y una cantidad desproporcionadamente mayor de víctimas son niños. La mayoría de muertes son causadas por la infección con el virus de la rabia transmitido por perros domésticos, generalmente a través de una mordedura de perro. El 28 de septiembre se celebra el Día Mundial contra la Rabia.
En una declaración conjunta, la Asociación Veterinaria Mundial (WVA, por sus siglas en inglés) y la Asociación Médica Mundial (WMA, por sus siglas en inglés) afirman que la rabia transmitida por mordedura de perro es una enfermedad de poblaciones desatendidas, con frecuencia en áreas de escasos recursos. "La mayoría de estas muertes podrían evitarse si más del 70 % de los perros pudieran vacunarse y si las víctimas de mordeduras fueran tratadas adecuadamente mediante el lavado de heridas y el tratamiento oportuno posterior a la exposición. En resumen, las herramientas necesarias para controlar la rabia están actualmente disponibles, sin embargo, la implementación de estas herramientas es el desafío actual y más grande", apuntan ambas asociaciones.
Sin embargo, la búsqueda de más herramientas preventivas no se ha detenido. La próxima frontera se centra en el desarrollo y la producción de nuevas terapias para neutralizar el virus infeccioso en humanos y animales. Éstos incluyen las inmunoglobulinas antirrábicas (RIG, por sus siglas en inglés). RIG ha estado disponible desde hace un tiempo, pero su uso a menudo se ha visto obstaculizado por el desabastecimiento, los altos costes y la administración tardía (especialmente una vez que se presentan los síntomas).
También se esperan nuevos métodos de diagnóstico para la detección precoz y confirmación de la infección. Los estudios de modelo de ratón de la enfermedad de la rabia muestran que la infección viral de las células nerviosas desencadena un proceso de degeneración idéntico al que se observa en varias enfermedades más comunes del sistema nervioso en las personas. Esto abre la posibilidad de una investigación novedosa, innovadora, interdisciplinaria y transversal en el desarrollo de herramientas para el diagnóstico temprano, el seguimiento y el tratamiento de la rabia en humanos y animales en una estrategia dedicada y colaborativa, a través del enfoque One Health, que conecta el medio ambiente con el bienestar animal y humano.
La presidenta de la WMA, Dra. Heidi Stensmyren, destaca que "'apropiadamente, el lema del Día Mundial contra la Rabia de este año es 'Una salud, cero muertes'. Se basa en el conocimiento de que para prevenir las muertes por rabia humana, se necesita una combinación de diferentes estrategias que incluya vigilancia y epidemiología, aumentando la conciencia pública y la comunicación de riesgos. También incluye educar a las comunidades y a los profesionales, promulgar leyes de apoyo, mejorar el manejo de la población canina, la vacunación masiva de perros en la comunidad, la profilaxis previa y posterior a la exposición, mejorar la capacidad de diagnóstico de laboratorio y establecer, además de proteger, zonas libres de rabia".
Por su parte, Rafael Laguens, presidente de la WVA, subraya que "es fundamental recalcar que, a diferencia de otras enfermedades, la humanidad ya cuenta con las herramientas necesarias para eliminar la rabia transmitida por perros. Esta zoonosis mortal es completamente prevenible, y las vacunas contra la rabia para perros pueden eliminar de manera eficiente esta enfermedad en su origen animal".