Las dietas convencionales, como las croquetas secas o las dietas enlatadas, son los tipos más comunes de dietas que se administran a las mascotas. Sin embargo, existe una tendencia reciente de alimentar a perros y gatos con dietas poco con vencionales, que incluye dietas caseras y vegetarianas o veganas.
Una encuesta realizada en los Estados Unidos y Australia observó que el 18 % de los perros y gatos fueron alimentados con dietas preparadas en casa, ya sea como parte de la dieta o como dieta principal. Una encuesta aplicada a más de 3.000 dueños de perros y gatos de 55 países observó que más del 60 % de las mascotas fueron alimentadas con comida casera como parte de la dieta, y el 12 % de los perros y el 6 % de los gatos fueron alimentados exclusivamente con este tipo de dieta.
Asimismo, la población vegetariana y vegana parece estar aumentando en todo el mundo. Un estudio realizado en los Estados Unidos, observó que el 5 % de la población encuestada es vegetariana y el 3 % es vegana. En el Reino Unido, se estimó que la población vegana era solo del 0,25 % en 2014, pero aumentó al 1,16 % en 2019. Las principales motivaciones para que los seres humanos se conviertan en vegetarianos o veganos son las preocupaciones éticas y de salud, las razones medioambientales o de sostenibilidad y la religión.
En este sentido, la elección dietética del propietario puede influir en el tipo de comida que eligen para alimentar a sus perros o gatos. Otro estudio que incluyó a 3.673 dueños de mascotas de habla inglesa observó que el 6.2 % eran vegetarianos y el 5.8 % eran veganos, también se observó que la mayoría de las mascotas que fueron alimentadas con dietas veganas o basadas en vegetales tenían dueños veganos.
En base a estas premisas, se ha llevado a cabo una investigación que tuvo como objetivo evaluar la calidad y la presencia y utilidad de suplementos en las dietas caseras vegetarianas y veganas.
Se realizaron análisis químicos en 75 dietas para perros y 25 para gatos. Para llevar a cabo la selección, los investigadores eligieron una lista de recetas buscadas a través del buscador Google.
DIETAS BAJAS EN PROTEÍNAS Y ALTAS EN FIBRAS
Tras la realización de los análisis, los autores del estudio observaron que las dietas vegetarianas y veganas para perros y gatos presentaron concentraciones más bajas de proteína cruda y concentraciones más altas de fibra cruda que las dietas con carnes.
“Los niveles más bajos de proteínas de estas dietas pueden deberse a la mayor inclusión de ingredientes vegetales que no necesariamente se seleccionan en función del contenido de proteínas”, señalan.
Se esperaban concentraciones más altas de zinc en los preparados que contienen carne para perros, ya que este nutriente está presente en mayores cantidades en productos animales, especialmente carnes y despojos. Además, explican que el fitato presente en los ingredientes vegetales puede unirse al zinc y reducir su biodisponibilidad, lo que puede aumentar el potencial de deficiencia de zinc.
Los niveles de manganeso, magnesio y fibra cruda fueron más altos en las preparaciones vegetarianas y veganas, lo que puede explicarse por el hecho de que estos nutrientes están presentes en mayores cantidades en los productos vegetales.
Además, de acuerdo con los resultados del estudio, “se puede sugerir que la presencia de un suplemento por sí solo no garantiza una dieta balanceada, porque ninguna de las dietas fue completa independientemente de la inclusión de suplementos. Este es un resultado importante ya que demuestra que una dieta debe formularse como un todo, considerando la inclusión de todos los ingredientes y su combinación de nutrientes, incluido el suplemento. Incluso cuando se agregó un suplemento multimineral de acuerdo con las instrucciones del fabricante, las dietas permanecieron desequilibradas”.
En conclusión, “ninguna de las recetas evaluadas suministró todos los nutrientes analizados, incluidas proteínas, grasas y minerales esenciales”.