La toxoplasmosis es considerada como una de las enfermedades de transmisión alimentaria más relevantes, por ello es fundamental conocer los factores relacionados con la transmisión, persistencia y prevalencia de la infección por Toxoplasma gondii.
El jabalí euroasiático (Sus scrofa) podría desempeñar un papel relevante en el ciclo de vida de T. gondii. Esta especie es el animal de caza mayor más consumido en España y puede actuar como foco de infección si la carne se consume cruda o poco cocida, o por contaminaciones cruzadas.
Además, el jabalí puede actuar como un excelente bioindicador de la circulación de T. gondii en el ecosistema, ya que su comportamiento natural conduce a la exposición a los quistes del patógeno.
Con el fin de analizar si el jabalí euroasiático juega un papel relevante en la transmisión, persistencia y prevalencia de Toxoplasma gondii, Víctor Lizana, Alba Martí-Marco, Jordi López Ramón y Jesús Cardells del grupo SAIGAS de la Facultad de Veterinaria CEU UCH, con la colaboración de investigadores del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos IREC, y de las Universidades de Zaragoza y Autònoma de Barcelona, han muestreado más de 1000 jabalís de la zona mediterránea, entre 2010 y 2017.
Las muestras de sangre se analizaron con una prueba ELISA indirecta dando un total de 14. 1 % resultados positivos. La prevalencia no fue homogénea ni en los animales ni en los distritos muestreados.
Se encontraron diferencias significativas en cuanto a edad, condiciones climáticas y ocupación del espacio humano. En este sentido, las poblaciones humanas se identificaron como un factor influyente en el riesgo de infección por T.gondii.
“Este enfoque múltiple nos permitirá evaluar los riesgos locales de contaminación humana y ambiental”, eplican los autores en el estudio.