Ponen en valor la labor de los puestos de inspección fronteriza en el control de la sanidad animal

Laura Magaz, funcionaria del Cuerpo Nacional Veterinario destinada en la Delegación del Gobierno en Castilla y León como responsable regional de Sanidad Animal de Castilla y León y Cantabria, destacó ayer durante la conferencia programada por el Colegio de Veterinarios de Valladolid con motivo del Día Mundial contra la Rabia la “gran labor” que ejercen los puestos de inspección fronteriza para controlar que los animales que acceden a España están libres de esta zoonosis.

La veterinaria, que desarrolló sus funciones durante nueve años en el puesto de inspección fronteriza de Algeciras y Tarifa, explicó cómo se vigila que los animales que entran a España estén perfectamente identificados y cuenten con la vacunación antirrábica, “dado que nuestro país, al tener frontera con zonas del Magreb, donde la enfermedad es endémica, debe controlar particularmente este aspecto”.

En su disertación, señaló que a diario los pasos de Ceuta y Melilla con Marruecos registran un flujo elevado de personas y mercancías, lo que obliga a extremar las precauciones, “sin olvidar la presencia de turistas españoles en ese y otros países, donde siempre se aconseja que eviten el contacto con perros y, en caso de mordedura, recibir de inmediato la vacuna”.

Magaz también hizo referencia el reciente caso de rabia detectado en un cachorro en Alemania, que llegó desde Turquía vía Bulgaria, “lo que confirma el peligro que supone la entrada ilegal de perros en Europa desde países del Este o de África sin el control sanitario en aduana”.

VACUNACIÓN IMPRESCINDIBLE

Para evitar la aparición de brotes de enfermedad, originados por la llegada de animales en periodo de incubación, reiteradamente evidenciado en los últimos años en diferentes países europeos, es imprescindible que los animales de mayor riesgo, fundamentalmente los perros, se encuentren vacunados.

Por ello, insistió en la necesidad de continuar con la vacunación antirrábica en toda España como parte del concepto de “tenencia responsable”, y recordó que los niveles óptimos de inmunidad frente a esta zoonosis se obtienen a partir de un 70 por ciento del censo canino vacunado. “Hay que subrayar que, entre los objetivos sanitarios de la Agenda 2030, figura la erradicación de la rabia entre otras enfermedades, como la tuberculosis y la malaria, lo que obliga a hacer un esfuerzo de prevención y profilaxis en las zonas más desfavorecidas del planeta”, concluyó.

El Día Mundial contra la Rabia (DMR), establecido por la Alianza Global para el Control de la Rabia (GARC) y reconocido por la OMS cada 28 de septiembre, es una jornada trascendental para recordar que la prevención de enfermedades en los animales no solo protege su salud y bienestar, sino que es uno de los pasos más efectivos que se pueden dar para proteger la salud de las personas y el medio ambiente. 

El lema de 2021 es: "RABIA: HECHOS, NO MIEDO", que destaca la importancia de crear conciencia sobre la enfermedad, vacunar a la población a los perros y educar a las personas sobre los peligros de la rabia y cómo prevenirla.