Se trata de un incendio que ya ha destruido más de 10.000 hectáreas y se le considera como el primero de este año de los denominados de sexta generación, llamados así porque pueden alterar las condiciones meteorológicas y causar tormentas de fuego, tan peligrosas para zonas boscosas o con amplia presencia de árboles y otros matojos secos en época estival.
Las causas del aumento de este tipo de incendios se achacan al cambio climático, que seca la vegetación por un mayor aumento de la temperatura, y el abandono rural, que permite que los matojos y la masa boscosa se multiplique y permita que el fuego pueda avanzar sin freno por la zona.
Ante ello, Provacuno recuerda la importante acción de limpieza que realiza la ganadería de vacuno en los montes al desbrozar o limpiar estas zonas. Así, el ganado lleva muchos años siendo una de las vías de prevención de incendios por la limpieza de ciertas zonas de montes que no se siegan ya, ni a mano ni con maquinaria especializada. La ganadería bovina se convierte así en una gran medida preventiva en la limpieza de pastos con las llamadas ‘vacas bombero’, que suponen una solución para mantener los montes limpios y libres de material inflamable.
Los incendios forestales son uno de los principales emisores de gases del mundo y la ganadería es la principal herramienta para eliminar biomasa fácilmente inflamable, actuando como un "cortafuegos" eficiente, que además evita la contaminación atmosférica y de acuíferos procedente de los incendios.
El mantenimiento de la ganadería en el medio rural, y la utilización de las superficies de pastos, genera un amplio abanico de servicios ecosistémicos, entre los que destacan el secuestro de carbono, la retención de agua y recarga de las masas de agua subterránea, la lucha frente a la erosión, la prevención de incendios y la conservación de la biodiversidad.
Además, desde hace años en Andalucía hay grupos de ganaderos junto con personal de la Consejería de Ganadería y Medio Ambiente que han desarrollado lo que se llama la red de pasto-cortafuegos de Andalucía (RAPCA). Una magnifica herramienta de prevención que aprovecha las actividades tradicionales, facilitando el desarrollo sostenible y resaltando la figura y labor tradicional del ganadero. De esta manera, la acción del ganado ordenada y controlada mantiene limpias las áreas de cortafuegos, provocando así discontinuidades en los bosques que impiden la propagación de los potenciales incendios forestales.
Una iniciativa que se suma al papel de Provacuno a la hora de prevenir desgracias como el incendio de la malagueña Sierra Bermeja, que continúa en activo.