Los veterinarios españoles Rocío Bustamante, Gustavo Ortiz-Díez, Susana Canfrán, Ignacio A Gómez de Segura y Delia Aguado, de la Universidad Complutense de Madrid, han llevado a cabo una encuesta entre compañeros de habla hispana en la que recogen información sobre el uso de anestesia intravenosa total (TIVA, por sus siglas en inglés).
Para llevar a cabo el estudio, se envió un cuestionario anónimo por correo electrónico a representantes de las cuatro asociaciones veterinarias de anestesia y analgesia más importantes de habla hispana. La encuesta se distribuyó a través de listas de correo (España, Argentina, México) o redes sociales (España, Chile) para recopilar información sobre el uso, opiniones y ventajas percibidas de TIVA, así como sobre las alternativas preferidas al isoflurano para proporcionar anestesia general.
Tras recibir los cuestionarios, los investigadores han concluido que un total de 275 (92 %) de los participantes habían usado TIVA. De ellos, un 24 % raramente, un 36 % a veces, y un 40 % muy a menudo o siempre. Hubo una asociación entre una mayor tasa de uso de TIVA y un bajo nivel de especialización, así como una menor experiencia clínica y una falta de disponibilidad de sistemas de inhalación de gases anestésicos.
Las principales razones para no utilizar TIVA fueron la falta de familiaridad con la técnica (92 %), la no disponibilidad de bombas de infusión (32 %), el protocolo de anestesia establecido (32 %) y la dificultad técnica (20 %).
Entre los usuarios frecuentes de TIVA, una proporción mayor informó la mayor facilidad de uso de TIVA (52 %) en comparación con aquellos que no aludieron a dicho beneficio (17 %). Gran parte de los encuestados no consideraron TIVA más caro (60 %), más difícil de realizar (59 %) o mayor dificultad en el manejo del equipo (53 %), que la anestesia inhalatoria. Asimismo, en ausencia de isoflurano, los profesionales prefirieron usar un agente inhalatorio alternativo (59 %) en lugar de TIVA (47 %).
Los veterinarios concluyen en el estudio que el uso de TIVA está muy extendida entre los veterinarios. Los usuarios frecuentes de TIVA informaron de la percepción de mayores ventajas intrínsecas a esta técnica. Por otra parte, en situaciones de escasez de isoflurano, se prefirió un anestésico inhalatorio alternativo al TIVA.