El presidente del Colegio Veterinario de Badajoz, José-Marín Sánchez Murillo, ha publicado una carta donde expresa su indignación por haber sido “ninguneados en esta pandemia a todos los niveles”.
“No solo ya porque no se ha tenido en cuenta nuestra opinión a la hora de tomar decisiones en el control de la misma, sino que, además, contemplamos con asombro cómo somos la única profesión sanitaria a la que no se ha vacunado, y todo ello sin ningún tipo de explicación que, por cierto, hemos pedido por escrito”, explica.
Sánchez Murillo recuerda que los veterinarios son sanitarios y así lo recoge la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias (LOPS), además de haber sido considerada como actividad esencial durante la pandemia, por ello no entiende como el consejero de Sanidad de Extremadura, José María Vergeles, al igual que está sucediendo en muchas comunidades autónomas, no ha vacunado a los veterinarios junto al resto de profesiones sanitarias y otros colectivos. “Ya sé que los veterinarios del SES se han vacunado, solo faltaba eso”, aclara en su escrito.
Asimismo, el presidente veterinario se dirige a Vergeles para que no olvide “que nosotros durante toda la pandemia hemos seguido trabajando para proteger la salud de los animales y de las personas. Que fuimos los primeros en donar nuestros guantes y mascarillas, que donamos también nuestros respiradores de las clínicas veterinarias, gracias a los cuales se salvaron muchas vidas humanas. Ahora Extremadura (mejor dicho, sus gobernantes), una de las regiones más ganaderas de España, se olvida de sus veterinarios. En fin, sinceramente creo que no nos merecemos esto”, concluye.