Nadie niega que al terminar la carrera es necesario formarse de manera práctica y que realizar un internado parece la opción ideal. Pero este tipo de ofertas suelen incluir sueldos muy bajos, con horarios interminables y niveles de estrés altísimos.
Entonces, ¿merece la pena hacer un internado?
Según a la persona a la que preguntes la respuesta será sí o no. Yo por mi parte no llegué a realizar internado, (aunque cabe decir que lo intenté) pero tengo muchos compañeros que sí lo hicieron y cuentan experiencias muy duras.
En esta entrega de Revolución Veterinaria me acompaña Tacha Escario, veterinaria especializada en nutrición y fisioterapia.
Tacha comparte con nosotros su experiencia, el punto de inflexión en que hasta se planteó dejar la veterinaria y cómo se reinventó para seguir practicando la profesión.
Conversamos también sobre el panorama actual de los internados y nuestra opinión sobre este tema.
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