El Boletín Oficial del Estado del viernes 24 de julio publicó el Convenio de encomienda de gestión por el que el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación encarga a la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) la realización de trabajos relacionados con la gestión sanitaria de poblaciones de mamíferos marinos (cetáceos) en España.
Este convenio está firmado por Valentín Almansa de Lara, Director General de Sanidad de la Producción Agraria del Ministerio y Rafael Robaina Romero, Rector de la ULPGC.
Los trabajos que va a desarrollar el Instituto Universitario de Sanidad Animal y Seguridad Alimentaria (IUSA) de la ULPGC están amparados por la Ley de Sanidad Animal de 2003, donde se establece la necesidad de desarrollar medidas encaminadas a la gestión sanitaria de la fauna silvestre con el objetivo de prevenir la entrada de enfermedades en la fauna silvestre, así como medidas para monitorizar la evolución de las enfermedades presentes en nuestro territorio de interés oficial, y controlar las enfermedades exóticas en caso de brote epizoótico, es decir una posible transmisión desde los animales a las personas.
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha considerado necesaria la vigilancia de la situación sanitaria de las poblaciones de cetáceos, así como la formación especializada e innovación de protocolos de campo y laboratoriales para que pueda actuar como un instrumento eficaz del sistema de control y prevención de los brotes de las enfermedades de estos mamíferos marinos.
El Instituto Universitario de Sanidad Animal y Seguridad Alimentaria (IUSA), centro español colaborador de la Organización Mundial de Sanidad Animal, tiene una larga tradición en trabajos de investigación, desarrollo e innovación sobre sanidad en fauna silvestre (terrestre y marina) y, además, su localización geográfica en la frontera Sur de Europa en el Atlántico, con más de 30 especies de cetáceos en la zona, confiere a los trabajos sobre vigilancia y alerta sanitaria en estos animales marinos un papel estratégico para la detección precoz de enfermedades animales (alguna de ellas, con potencialidad de transmisión a humanos).
En el convenio se indica que el papel del IUSA “puede aportar datos epidemiológicos relevantes a nivel nacional e internacional”, por lo que se acuerda una colaboración de 36 meses naturales, con posibilidad de ampliación a 36 meses adicionales si así fuera necesario por acuerdo de las partes.
Entre otras tareas, en el convenio se prevé el establecimiento de un banco de tejidos positivos a patógenos en cetáceos, con el fin de tener controles positivos y poder colaborar, si procediera con laboratorios nacionales e internacionales; así como la organización de jornadas teórico-prácticas para veterinarios, como un programa de formación con especialistas, nacionales e internacionales, tanto en trabajo de campo como en diagnóstico laboratorial, epidemiológico o gestores sanitarios de la administración.
El presupuesto de este convenio asciende a 60.000€, que serán abonados en cuatro plazos entre los años 2020 y 2023.