Recomiendan aplicar medidas preventivas frente a la angiostrongilosis canina en España

Angiostrongylus vasorum es el agente causante de la angiostrongilosis canina, una enfermedad que afecta principalmente a perros domésticos y otros carnívoros salvajes. En Europa, el número de individuos infectados está aumentando, estando ubicados en países del centro y sur. En España, varios estudios han reportado una alta prevalencia de A. vasorum en animales salvajes. Sin embargo, no hay estudios que aborden la situación actual de la enfermedad o su distribución en perros domésticos, y los informes del personal veterinario son muy limitados.

Teniendo en cuenta estos hechos, investigadores de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Las Palmas han llevado a cabo un estudio para evaluar la prevalencia de A. vasorum en diferentes áreas de España.

Entre noviembre de 2018 y octubre de 2019, tomaron muestras de sangre de un total de 2.024 perros domésticos de seis zonas de España con un clima que favorece el establecimiento de la enfermedad, donde todos los perros incluidos en el estudio vivían al aire libre o tenían acceso regular a áreas con vegetación y ninguno había viajado fuera del área de estudio de interés en el último año. Asimismo, informan que recopilaron detalles sobre su sexo y edad.

RESULTADOS

La prevalencia general de angiostrongilosis canina en las áreas estudiadas de España fue del 1,73%. No se encontraron diferencias en la prevalencia general entre machos y hembras, ni entre grupos de edad. Con respecto a las áreas ecoepidemiológicas, la mayor prevalencia se registró en las zonas ubicadas en el norte y noroeste de España (1.86–2.74%), que corresponden a los climas más húmedos y la vegetación más abundante, y la menor prevalencia se detectó en las zonas ubicadas en el centro y oeste de España (0,93–0,99%).

“Nuestros datos sugieren que la angiostrongilosis está presente en España en perros domésticos donde existían animales salvajes previamente infectados o donde las condiciones climáticas son favorables para el establecimiento de la enfermedad”, indican los investigadores.

Asimismo, tras las prevalencias registradas en las zonas estudiadas, “se deben prescribir medidas profilácticas para perros que tienen acceso regular al exterior o contacto con la vida silvestre susceptible a la enfermedad. Especialmente en perros jóvenes y cachorros en aquellas zonas que mostraron las prevalencias más altas, que corresponden a los climas más húmedos y lluviosos del país”.

Además, señalan que los veterinarios deben ser conscientes de la importancia de esta enfermedad para llevar a cabo campañas de control apropiadas y crear conciencia entre los dueños de mascotas.