Las cataratas son una de las principales causas de ceguera en personas de todo el mundo y la causa más común de discapacidad visual en personas mayores de 55 años. Al igual que las personas, a medida que los perros envejecen, sus ojos pueden comenzar a verse más nublados. Si bien existen muchas similitudes entre el ojo humano y el ojo canino, existen muchas diferencias, incluida la causa más común de cataratas en los perros.
Una catarata es una opacidad en la lente, que enfoca la luz en la retina. En perros, la causa más común de una catarata es la genética. La mayoría de los perros que desarrollan cataratas hereditarias lo hacen cuando son jóvenes o de mediana edad. Criar a un perro con cataratas hereditarias puede llevar a transmitir esta mutación a su descendencia.
La diabetes es la segunda causa más común de cataratas caninas. “Después de un año de ser diagnosticado con diabetes, la mayoría de los perros desarrollarán cataratas avanzadas. Curiosamente, es muy raro que los gatos con diabetes desarrollen cataratas debido a las concentraciones variables entre las especies de enzimas que procesan altos niveles de azúcar en el cristalino”, explica Emily Sharpe, veterinaria oftalmóloga del Colegio Americano de Oftalmólogos Veterinarios.
Una catarata en un labrador retriever con diabetes.
CIRUGÍA PARA ELIMINARLAS
Para eliminar las cataratas y restaurar la visión, la experta señala que se requiere cirugía. “En general, la cirugía de cataratas se recomienda para pacientes con cataratas avanzadas o cataratas que afectan la visión. La cirugía de cataratas en perros se realiza de manera similar a la de las personas, excepto que los perros deben estar completamente anestesiados”.
Si bien, Sharpe asegura que, si no se puede realizar la cirugía, los perros con discapacidad visual aún pueden tener una calidad de vida maravillosa. “Para adaptarse a la pérdida de visión, los perros dependen en gran medida de sus sentidos del olfato, tacto y audición. Pueden hacer ajustes mínimos para asegurarse de que no pueden lesionarse accidentalmente, como evitar escaleras, piscinas, etc. Las cataratas avanzadas pueden provocar inflamación dentro del ojo, por lo que los perros con cataratas deben tratarse con gotas para los ojos antiinflamatorias”, apunta.
Mientras que algunos perros mayores desarrollan cataratas, la esclerosis nuclear es la razón más común para que los perros desarrollen una apariencia turbia en sus ojos. “Un cambio normal de envejecimiento en los perros, la esclerosis nuclear no causa pérdida de visión”, aclara. La compresión de las fibras de la lente y el endurecimiento del centro de la lente dan como resultado una apariencia turbia. Este cambio también ocurre en personas que resultan en presbicia. Esta es la razón por la cual las personas alrededor de los 40 años comúnmente necesitan gafas para leer, ya que su lente ya no es tan “flexible” como lo era antes.
Por último, si le preocupa que el ojo de su perro se vea turbio, la oftalmóloga recomienda consultar a un veterinario “para un examen oftálmológico para determinar la causa y derivarlo a un oftalmólogo veterinario si fuera necesario”.