Tras la detección del primer caso de fiebre del Nilo Occidental este año en España el pasado 27 de septiembre, en Diario Veterinario informábamos de un segundo caso esta vez en la de Almonte, Huelva.
Si bien, desde el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) han anunciado dos casos más de la enfermedad. Nuevamente se ven afectadas las provincias andaluzas de Sevilla y Huelva.
El pasado 23 de octubre las autoridades informaron de un foco en la localidad sevillana de Utrera y el 25 de octubre se detectó otro foco en la localidad de Lepe, Huelva.
El virus está presente en varios humedales de la mitad sur de España, donde circula entre su reservorio (las aves) y su vector (los mosquitos, principalmente de la especieCulex pipiens). De ellas, la enfermedad salta a los humanos y a los caballos.
MAPA explica que las aves son consideradas reservorio de la enfermedad, jugando un papel muy importante en la diseminación del virus.
Por su parte, el mosquito infectado puede transmitir la enfermedad a équidos (especialmente caballos), aunque también es posible la transmisión a personas. Los mosquitos no se infectan al picar a los caballos, ni se transmite entre caballos y personas.